Hace un par de semanas, cuando Eloy estaba a punto de cumplir los 27 meses, descubrimos que se marea en el coche. Todo comenzó cuando nos fuimos de comunión a Sevilla a mediados de abril. Hasta los 2 años, los viajes en coche eran de lo más normal, pero cuando en este viaje nos ha vomitado dos veces, empezamos a “preocuparnos”.
Antecedentes
Realmente el primer vómito vino 1 mes antes de cumplir los 2 años aunque no le dimos importancia, pero después de los dos de este viaje más otro cuando fui a dejarlo en casa de mis padres en el puente de mayo, puso la voz de alarma. Os cuento un poco la historia.
Poco antes de salir de casa hacia Sevilla me di cuenta que los zapatos que le había comprado eran cada uno eran de una talla por lo que decidimos parar en un centro comercial de camino. Todo iba bien hasta que empezamos a coger curvas y rotondas para entrar. Dos curvas antes de aparcar empezó a vomitar. Os podéis imaginar cómo se puso él, cómo puso el coche y la ropa de alrededor. Lo mejor para iniciar un viaje. Mientras yo iba a cambiar los zapatos, su padre le cambió de ropa y limpió lo que pudo. El resto del viaje transcurrió con normalidad.
Al día siguiente, sábado, pusimos rumbo a la celebración de la comunión a 3km escasos de donde estábamos, pero al ser de pueblo a pueblo, tuvimos que callejear mucho. Justo cuando aparcamos el coche, volvió a vomitar. Imaginaos el panorama. Por suerte le llevábamos con el body por lo que la camisa no se manchó pero el pantalón acabó lleno de vómito. Buscamos una tienda en el pueblo para comprar unos pantalones y a la celebración.
Una vez acabada la comunión y ya en casa, empecé a leer sobre los mareos en el coche de los niños y lo que encontré me pareció bastante interesante.
Mareo por movimiento o cinetosis
1El mareo por movimiento o cinetosis es un trastorno del equilibrio debido al movimiento en las personas que viajan en coche u otros medios de transporte (avión, tren, barco). Esto sucede porque el cuerpo está parado pero todo se mueve a nuestro alrededor.
Este trastorno de equilibrio se produce cuando nuestro cuerpo manda señales confusas al cerebro. Por un lado, con los pies quietos le indicamos al que estamos parados pero si además tenemos la vista fija en un punto, le “confirmamos” esa información, pero sin embargo, el movimiento del coche hace que el líquido de nuestro oído si se mueva y digamos, ahí es donde viene el problema y donde nuestro cuerpo no entiende esas señales, se hace un lío y la forma de dar la cara es mediante los mareos y vómitos.
Tal y como cuenta Boticaria García en su post Mareo infantil en el coche de papá (cinetosis): causas y tratamiento, y el que más me ha gustado de todos los que leí, antes de los 2 años el sistema nervioso es inmaduro y por eso hasta entonces no aparecen los síntomas.
Por suerte para algunos padres, no todos los niños sufren mareos.
¿Hay forma de evitar los mareos?
Como todo, hay formas de intentar evitarlos, aunque si vienen, vienen:
Alimentación
Una de las cosas que leí en mi pequeña investigación fue que hay que intentar evitar coger el coche con los peques recién comidos, sobre todo si han consumido líquidos. Antes de ponerse en marcha, es preferible dar sólidos y poca cantidad. Tampoco es bueno llevarlos con el estómago vacío ya que la falta de azúcar también puede provocar mareos.
Sueño
Otra de las cosas que me pareció interesante fue que durante el sueño los niños no se marean por lo que hay que intentar viajar coincidiendo con sus horas de sueño. Cuando son peques es más sencillo pero según van creciendo, que vayan durmiendo casi todo el camino es algo más complicado, pero hay que intentar ajustar horarios lo mejor posible, siempre que se pueda.
Buena ventilación
Una buena ventilación en el coche ayuda a que no esté sobrecargado y evitemos el calor excesivo o los olores fuertes. En mi caso por ejemplo, cuando era pequeña, mis padres tenían la costumbre de coger eucalipto y ponerlo en el coche. Esto hace 30 años, con coche sin aire acondicionado, con 40 grados a la sombra, os podéis imaginar el olor intenso que se mascaba en el coche. Hoy en día soy incapaz de oler el eucalipto sin que se me revuelva un poco el estómago.
Mirar a un punto fijo
Cuando montaba en barco de pequeña, solía marearme mucho y mi padre siempre me decía que mirase a un punto fijo en la costa (o del horizonte cuando la costa no se veía). La verdad es que me ayudaba a controlar los mareos. En el coche sucede un poco lo mismo, cuanto más fija lleven la mirada, mejor para evitar mareos. En este caso no encontré nada que me convenciese en cuanto a si es bueno o malo que vayan viendo un DVD o el móvil, más allá de si es “bueno o malo” que lo hagan. A Eloy le ponemos vídeos cuando el viaje va a ser muy largo y nunca se ha mareado, pero también ha coincidido que estaba cerca de quedarse dormido o que no había tomado líquidos, que sinceramente, creo que es la clave.
Conducción suave
Esto, junto con la ingesta de líquidos, creo que son las dos cosas más importantes a la hora de evitar los mareos, ya que siempre que Eloy ha vomitado ha sido en zona de curvas y después de haberse tomado el biberón.
¿Y tomar algún medicamento?
Pues no os voy a mentir, el día que íbamos a volver lo primero que hice por la mañana fue acercarme a una farmacia a comprar Biodramina. Me preocupaba la somnolencia que da este tipo de medicamentos porque, sinceramente, no me gusta medicar así por así a mi hijo sobre todo si tiene efectos secundarios. Me dieron Cinfamar infantil. Se lo dimos media hora antes de salir y no sé si fue porque se había tomado el bibe unas horas antes, porque tenía sueño o porque hizo efecto, a la vuelta no tuvimos vómito. En ningún momento noté que el niño estuviera más dormido de lo normal por lo que creo que no tuvo ningún efecto secundario.
Mitos y leyendas: el corcho
Cuando comentamos en el pueblo que había vomitado dos veces, por así decirlo, pusieron dos corchos al peque en la silla del coche. Nos aseguraron que era un remedio infalible y cuando ese día no vomitó lo achacaron al corcho. Pero ya os digo que no funciona. Como podéis ver en la foto del puente de mayo, hay vómito y hay corcho. Ni me acordaba que el corcho estaba ahí pero ya me encargué de que se enterasen y de que dejen de contar remedios que no funcionan.
Toda esta información la he recopilado de varios blogs, pero sobre todo de estos enlaces que os dejo, que son los que más interesantes me han parecido:
https://www.bebesymas.com/consejos/adios-a-los-mareos-consejos-para-que-los-ninos-no-se-mareen-en-el-coche
http://boticariagarcia.com/2017/06/11/20140611cinetosis-mareo-infantil/
Vuestros peques, ¿se marean en el coche?
Siento la calidad y la “explicited” de las fotos pero no tengo mucho tiempo de hacerlas ni de buscarlas.