Una vez que los bebés comienzan a andar, ya no hay nada que les pare. Poco a poco van investigando, se convierten en pequeños aventureros que saben hacer demasiadas cosas solos, lo que les da mucha seguridad en sí mismos, lo que está muy bien para su desarrollo, pero al mismo tiempo les lleva inconscientemente a muchas situaciones de peligro. Es cierto que hay niños muy cautelosos e incluso algo miedosos, pero lo habitual es que a tan corta edad sean bastante temerarios.
Por todo esto, si a vuestro hijo no hay nada que le frene, debéis convertir vuestra casa en un lugar seguro y tomar unas medidas de protección para evitar que le pase algo malo hasta que aprenda. ¿Quieres algunos trucos?
- Márcale unos límites: probablemente aún no entienda del todo bien las cosas que le pides. Sin embargo, debemos marcarle unos límites para que poco a poco entienda lo que no debe hacer porque es peligroso. A medida que vaya creciendo irá comprendiendo, ya que su capacidad reflexiva es muy buena; así que, vamos. Marcar limites es una de las primeras opciones a desarrollar para proteger a os bebés cuando comienzan a andar.
- Otra forma de proteger a tu niño cuando incia su proceso de exploración y se suelta a andar por toda la casa es anticípate a lo que pueda hacer: durante esta etapa debes pensar como él y observar a tu alrededor para evitar que haga cualquier cosa peligrosa. ¡Vamos! No es tan complejo, es tu bebé, lo conoces mejor que nadie, ya verás que con un poco de práctica ya podrías anticipar sus comportamientos y prevenir posibles peligros.
- Préstale atención: por muchos ojos que tengamos puestos encima del niño, siempre ocurre algo. Lo único que puedes hacer es observarle para estar ahí siempre y que la cosa no vaya a más. Haz que recapacite sobre lo que ha ocurrido.
¿Cómo proteges a tu hijo?
Imagen: Irargench/flickr