El cáncer no solo afecta a los adultos, si no que también a los más pequeños. En las personas adultas suele darse por la exposición a agentes productores del cáncer (tabaco, dietas, sol, entre otros), mientras que en los niños las causas suelen ser desconocidas. Por eso queremos presentarles un nuevo proyecto.
Afrontar el cáncer es complicado para mayores y adultos, pero es más fácil si cuentas a tu lado con una asociación como la del hospital infantil de Jaén: “Pídeme la Luna”. Esta Asociación surge de la mano de la enfermera Marisol Escribano, la cual lleva 25 años trabajando en la planta de oncología del Hospital de Jaén. Trata de conseguir los sueños de los niños por difíciles que sean; ellos son los únicos que pedirían la luna.
Asegura que durante toda su carrera como enfermera ha sufrido, reído llorado, disfrutado y sobre todo ha aprendido de las circunstancias, de los niños y de sus familias. Intenta buscar soluciones a los problemas reales de la vida como es esta enfermedad; busca una dosis de positivismo con su asociación.
“Pídeme la luna” quiere hacer que los niños sean los protagonistas de sus sueños, que sonrían y que se les olvide aunque sea por unos instantes que están malitos.
“Yo tengo en las manos un tesoro” afirma Marisol, la misma que ha escrito el libro de “El águila y el gorrión” para destinar los fondos recaudados a la asociación.
Comer en un parador, nadar con delfines, conocer a jugadores de fútbol o ir a ver el musical del Rey León son algunos de los sueños que han podido cumplir gracias a la colaboración de muchas personas.
Pídeme la Luna consigue hacer sonreír a muchos niños y a sus familiares, pero también saca la parte más solidaria y humanitaria de las personas al volcarse con su ayuda en la asociación.
Y es que, la sonrisa de un niño no tiene precio, y toda lucha por conseguirla es poca.
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Imágenes: Pídeme la Luna
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