Y es que el Poder de las Redes Sociales, una vez más, ha demostrado que es imparable y que para bien en este caso y para mal en otros, vivimos desde ya hace tiempo en otra Era. La Era Digital.
Centenares de usuarios, móvil en mano, narraban en primera persona y en tiempo real lo que estaba pasando. Fue totalmente inútil que los militares tomaran por las armas la televisión pública. La mecha ya se había prendido en Facebook, Twitter y FaceTime.
Y eso que el Presidente, Recep Yaypic Erdogan, en 2013 trató de promulgar leyes que restringieran el “uso crítico” de las Redes Sociales porque le vapuleaban a diario en ellas. “Es una fuente permanente de problemas” dijo el presidente en su momento.
Pero hace unos días, se dio la vuelta la tortilla, y fue gracias a ellas desde donde animó a todos sus conciudadanos a lanzarse a la calle y frenar el “supuesto” Golpe de Estado a la Democracia Turca.
La intentona refuerza la figura de Recep Taypic Erdogan como presidente. Ahora la pregunta es: ¿Pudo simular un Golpe de Estado para reforzarse en el poder?
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