Hay personas que siempre las vas a llevar muy dentro.Las que no vas a volver a ver porque tus caminos se han separado, esas con las que compartiste risas, lagrimas, viajes y con las que con los simples recuerdos puedes llegar desde una carcajada hasta una gran sonrisa. Ojalá que la vida nos pueda reencontrar de una forma amable y amorosa, si por desgracia no es así, les deseo que su vida este llene de alegrías, bendiciones, salud, armonía y cosas lindas.
La familia que ya no ves por diferencias o falta de interés, este es un caso extraño ya que es muy difícil comprender como compartiendo lazos sanguíneos cercanos no hay empatia alguna o simplemente tu vida les da lo mismo, ofreces un cariño sincero y la respuesta es totalmente ausente, aquí es mejor evitar lastimarte y seguir adelante con las personas que en verdad te quieren y con las que se procuran mutuamente, es muy triste que ocurran estos casos, lo mejor es llevarlos en el corazón y desearles bendiciones, al final del día son familia.
Así puedo enumerar personas que están presentes en tus sentimientos día a día por mil hermosos motivos, por la convivencia diaria, por el poder tener la alegría de poder ir de la mano, creciendo juntos, recorriendo el camino, compartiendo experiencias y vida que incluyen momentos buenos pero también los malos, la luz y la sombra así como sus matices diarios, nada es perfecto, nadie lo es, lo que se valora es lo que en el corazón se da y se lleva.
A los 40 mi corazón es una suerte de edificio de departamentos donde cada quien tiene su espacio, su valor, su tiempo y sobre todo agradecimiento infinito y mi cariño.