Petit fresa, imagen de Tarmtott en Pixabay
Al igual que el petit suisse de chocolate, no es una receta para comer cada día, pero para darnos un capricho de vez en cuando sí que está muy bién. Es una receta muy fácil y resultona, salen buenísimos y no tienen nada que envidiarle a los petit suisse comprados, y la ventaja es que éstos sabes exactamente lo que llevan.
(La receta del petit suisse de chocolate la tienes aquí)INGREDIENTES:
600ml de leche entera o semi
3 cucharadas de azúcar
250ml de nata para montar (35% M.G.)
250g de queso fresco untar (1 terrina) a temperatura ambiente
1 sobre gelatina de fresaPREPARACIÓN
Ponemos la leche en un cazo y la calentamos al fuego; justo cuando esté a punto de hervir la retiramos y echamos la gelatina. Removemos bién para que se disuelva del todo.
Una vez disuelta del todo, añadimos el azúcar y volvemos a remover bién para que quede bien disuelto.
A continuación, añadimos la nata y la terrina de queso de untar. Es muy importante que el queso esté a temperatura ambiente para que se disuelva cn facilidad. Remover muy bién, hasta que no queden grumos. Si después de remover mucho siguen habiendo grumos, se le puede pasar la batidora y así nos aseguramos de que se disuelve todo bién, aunque no suele ser necesario, yo con la batidora de varilla manual suelo tener suficiente.
Lo dejamos reposar un poco para que no esté tan caliente y lo repartimos en vasitos; una vez frío los tapamos con papel de aluminio o film transparente (si los vasitos no tienen tapa) y los metemos en la nevera; mínimo 4 horas.
Y ya están listos para comer, ¡Que aproveche!