No he parado de reírme desde la primera a la última línea de este artículo. Reconozco que no conocía yo a Gaby Castellanos pero desde ahora soy muy muy fan. Eso sí que es una influencer y no lo que vemos por ahí…
Por favor, no dejéis de leerla, de seguirla y veréis el mundo de las redes sociales, el marketing y la comunicación en general con ojos mucho más realistas.
Os veo muy interesados en el asunto de los bots así que aquí vengo con una segunda entrega. Este post es menos de aprender a detectar cuentas fraudulentas y más de comentar los riesgos a los que te enfrentas si decides comprar followers.
Y sí…. también de algunos casos flagrantes de compras de followers en IG
Ni por asomo te voy a explicar dónde puedes hacerlo pero digamos que los hay mejores y peores. Como en las pescadería vamos. Si ves que el pez tiene ojos a la virulé y cuenta con más babas que Patricio el de Bob esponja, mejor no compres ahí.
Puntualicemos. No compres ninguno.
Los más elaborados de esos bots son los que son capaces de seguir a personas en base a sus palabras clave o hashtags. De este modo, lo normal en una cuenta de fitnes es que siga perfiles relacionados con la misma temática (comida sana, deporte al aire libre, complementos alimenticios etc…) y no sinergias rarunas como esas egobloguers que parecen tener predilección por perfiles de adolescentes tuneros que viven en Pakistán y que han posteado dos veces en dos años.
Una de esas cuentas, es de lo más divertida. Resulta que parece ser que este chaval tiene unos cuantos seguidores de España y ha posteado una foto con sus colegas pakistaníes en una tienda de zapas de deporte y en la otra aparece de lo más divertido en una fiesta. La monda.
Si os apetece, echad un vistazo a este perfil.
¿Qué interés puede tener una “influencer” española en estos dos lechones?
Has acertado. Ninguno. Porque es un fake!!
Pero vamos a las “Influencer de qué” o “influencers de pacotilla”, como las llamo yo.
A ver, la influencia no es algo que se mida en una única variable. Si tienes 60.000 seguidores, que los disfrutes con salud, pero como alguien se entere de que la mitad son Fakes, pues adiós al sueño americano.
La influencia es algo más. Es interacción, como la que generan tus fans reales. Sus comentarios, sus aportaciones, sugerencias e incluso sus opiniones negativas u odiadores (a estos es muy fácil detectarlos y mandarlos a paseo) y un compendio de variables más amplias que, estudiadas en conjunto, nos pueden dar una idea más acertada del nivel de influencia de un perfil.
Por ejemplo, las menciones que genera ese perfil en otros ámbitos, el número de veces que se comparten sus contenidos o la conversión final. Es decir, la consecución del objetivo para el que se te ha contratado. Y todo esto no sirve de nada si después de cada colaboración o campaña en la que participan estas “Influencers de qué” no se miden los resultados obtenidos. Lo demás, KK.
Ayer os hablaba de Followercheck, para mí una herramienta súper útil. Basta con introducir el nombre de tu cuenta de Instagram para poder autorizar a la aplicación a tomar muestras de los datos. Las siguientes veces, podrás introducir el nombre del perfil (sin “@”) de tooooodas las cuentas que quieras checkear (un máximo de 5 al día) y te dará dos datos relevantes:
1- Número de seguidores reales
2. Número de seguidores falsos
Además te los muestra en forma de gráfico de queso para que quede aún más clara la proporción.
Pero además de esta herramienta, internet está lleno de webs profesionales que se dedican a monitorizar cuentas para medir, entre otras cosas, estos datos. De este modo, una agencia de publicidad o comunicación que quiera elaborar un campaña en redes sociales de un producto o un servicio por ejemplo, estudia los perfiles de estas personas para ver cuánto de lo que dicen es cierto o no.
Claro que aún hay un montón de personas que realizan mala práxis y les tiemblan las canillas cuando ven que @fulanitadetal y @fulanitadepascual tienen 600.000 seguidores en Instagram aunque la mitad sean falsos.
Pero volviendo al asunto, lo bueno de esta pequeña revolución que ha supuesto el #botgate, es que a muchos se os han abierto los ojos y ahora tenéis una percepción diferente de estas personas. Lo mejor aún es que ahora todos contamos con la misma información para que el “juego” se realice en mejores condiciones e igualdad.
Pero antes de acabar, os voy a hablar de otra herramienta muy útil para detectar movimientos anormales en ciertas cuentas.
Socialblade
Es gratuita y lo mejor que tiene es que puedes analizar cuentas que no son tuyas.
Te muestra el dato de los seguidores que tiene, de la gente a la que sigue, le asigna una letra en función de la nota que le otorga a ese perfil que va desde A+++ a C y lo mejor es que muestra una gráfica abajo de la que se pueden extraer algunos datos relevantes.
Por ejemplo, si observas una subida repentina de seguidores un día, puede significar que ha coincidido con una compra de seguidores. Pero como ya hemos visto en Stories de Instagram, a veces esto no es así porque los datos no deben estudiarse nunca por separado sino en un contexto. Ese aumento puede significar que algún perfil de mucha relevancia ha enlazado a esta persona y le ha hecho ganar muchos seguidores. Lo curioso viene cuando eso se repite una y otra vez cada cierto tiempo. Por ejemplo, hoy has ganado exactamente 4.000 seguidores y dentro de dos meses, vuelves a ganar exactamente otros 4.000 y dentro de cuatro meses, ganas de nuevo otros 4.000. ¿Coincidencia?
Es evidente que no.
Pero también ocurre al contrario. Hay un perfil que yo he analizado y me ha sorprendido bastante. Un día obtuvo 7.000 seguidores de golpe y al día siguiente los perdió. Esto le ocurre un par de veces más a lo largo del siguiente año. Lo que me lleva a pensar que ese aumento corresponde a una compra de followers y el descenso se debe a que “te han pillao con el carrito del helao” y los administradores de la Red social te los han borrado.
El extraño caso de…
Aquí van tres egobloggers (hombres y mujeres) y una especializada en organización de cosas varias.
Según Follower Check
@lareinadelospeines tiene 917.000 seguidores en IG de los cuales 235.000 son fakes
@antoñitopatasflacas tiene 854.000 followers de los cuales 54.500 son fakes
@soylareinadelasflowers tiene 160.000 seguidores de los cuales 74.000 son fakes
Y por último….
@pongocaradelimon que tiene 616.000 followers de los cuales 95.000 son fakes
El principal coste de esta práctica
Es obvio que todo lo que hagas de forma fraudulenta puede tener una consecuencia.
Y un secreto:
Esa consecuencia siempre es negativa.
¿La peor de ellas?
La pérdida de confianza de quien te sigue. Uno de los principales problemas a los que se enfrentan las grandes corporaciones / políticos / medios de comunicación / es el menoscabo de su confianza en el cliente como consecuencia de:
Resulta que usas aceite de palma en productos infantiles
El agua que vendes embotellada es el realidad del Támesis
Ahora me entero de que apareces en los papeles de Panamá
O sea que no publicas el escándalo de tal empresa porque mete mucha publicidad en tu periódico
Me acabo de enterar de que fulanita y menganito han comprado al 30 por ciento de sus followers
Y la pérdida de confianza es de las cosas más difíciles de recuperar. Y todos conocemos casos que se han viralizado muy rápido como consecuencia de la aparición de las redes sociales ¿no?
Y tú, ¿Acabas de caerte también del guindo y has flipado mucho con todo esto?
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