Palopalú surge como un proyecto cooperativo entre la restauradora Rosalía Fernández y la ilustradora Elena Murillo. Es una marca de juguetes y objetos de decoración, todo en madera, realizado a mano y en series limitadas, cuidando en todo momento la originalidad.
Todo lo que crean une ilustración y diseño, y a la vez aporta valor pedagógico y educativo. Realizan juguetes con materiales naturales y respetuosos con el medio ambiente, cargados de creatividad e imaginación con posibilidades ilimitadas de juego y que potencian la imaginación de pequeños y mayores. Son juguetes diferentes y casi únicos, realizados a mano con muchísimo cariño.
Su materia prima estrella es la madera, en su mayoría reciclada. Y las pinturas que utilizan, son de base al agua que, no tóxicas y aptas para los más pequeños. Los juguetes siempre están libres de barnices y todos los bordes están redondeados, siendo ideales para las pequeñas manitas.
Todos sus materiales con valor educativo ofrecen múltiples beneficios para pequeños y mayores. Por otro lado, al tener un diseño tan original no se encasillan en un rango de edad concreto, siendo ideales también para trabajar con la tercera edad.
Como son juguetes en su mayoría manipulativos y constructivos favorecen el aprendizaje, la psicomotricidad, la coordinación óculo-manual y la precisión, y a su vez estimula la precisión y la creatividad.
Por supuesto son personalizables. Sus creadoras están abiertas a encargos de material educativo y pedagógico más específico por parte tanto de padres como de docentes. Es tan fácil como ponerse en contacto con ellas a través de info@palopalu.com y contarles tu idea o necesidad.
NUESTROS FAVORITOS
CASITAS CON PERSONAJES
Un preciosojuego de construcción hecho a mano en madera sin barnizar y con pintura al agua no tóxica, e ilustrado con un diseño muy original.
Está compuesto por 17 piezas (6 personajes con diferente ilustración en cada lado y 11 casitas) con diferentes formas geométricas con las que los peques podrán construir su propia ciudad. Esta recomendado a partir de 3 meses y viene en una bolsa de algodón preciosa.
Se trata de un juego que ayuda a los peques desde edades tempranas a desarrollar el juego simbólico y la imaginación, y también a simular o recrear situaciones de la vida real. Es perfecto para complementar con otros juegos de construcción, muy versátil y con una larga vida.
Permiten crear mini mundos con diferentes temáticas, contar historias, trabajar la coordinación óculo-manual y por si fuera poco, también se convierte en un divertido juego de equilibrio. ¡Sus posibilidades son infinitas!
Desde mi punto de vista, es un juguete maravilloso para que los peques reflexionen acerca de que todos somos diferentes y de que no siempre las personas que conocemos acaban siendo realmente como en un primer momento aparentan ser, que no debemos guiarnos solo por las primeras impresiones sino conocer a las personas desde diferentes perspectivas y en diferentes situaciones para conocer realmente como son y lo que pueden aportarnos.
Lospersonajes que acompañan a estas casas son diferentes por cada lado, favoreciendo así que los peques comprendan que las primeras impresiones siempre engañan porque aunque por ejemplo, estos muñecos pueda parecer que son iguales o que la única ilustración que tienen es la que se ve desde una perspectiva, si les dan la vuelta los ven desde una forma diferente.
Por otro lado, al ser personajes abstractos, sin características concretas, fomentan el desarrollo de valores como la tolerancia y el respeto hacia todos, independientemente de sus características. Todos los personajes son muy diferentes entre sí, como las casas, pero algunos de ellos comparten cosas como por ejemplo algunos colores o tonalidades. Igual que las personas, todos somos diferentes pero tenemos cosas similares a los demás. Y al fin y al cabo todos se convierten en ciudadanos del lugar que nosotros queramos crear.
Como veis las posibilidades que ofrece este conjunto de casitas y personajes son infinitas, al no estar ilustrados de forma realista no le cortan las alas a la imaginación y cualquier forma de juego es posible. Con estas figuras los peques podrán crear mil y una historias ya que las puertas de la creatividad están más que abiertas a todo lo que se les ocurra.
BOSQUE
Un precioso juego con animales y árboles del bosque hecho a mano en madera sin barnizar, con pintura al agua no tóxica e ilustrado con unas ilustraciones preciosas por ambos lados.
Es un material que nos ha robado el corazón, se trata de un conjunto de 11 piezas de madera; 5 árboles es y 6 animalitos representativos del bosque: un ciervo, una ardilla, un conejo, un pájaro, un zorro, y un erizo. Se presenta en una bonita bolsa de algodón.
Es un juego que ayuda a los peques desde edades tempranas a desarrollar el juego simbólicoy la imaginación, y también a simular o recrear situaciones que pueden ocurrir en el bosque. Es perfecto para complementar con otros juguetes de madera o con elementos naturales, muy versátil y con una larga vida. Además, refuerza la psicomotricidad y la coordinación óculo-manual.
Se trata de un juguete de altísima calidad con el que además del juego libre o de representación con los propios elementos, enseñamos el cariño hacia la naturaleza y la importancia de cuidarla y respetarla. Si desde pequeños aprenden a respetar a la naturaleza, dándose cuenta de que tanto las plantas como los animales son seres vivos que merecen que los tratemos igual que nos gustaría que nos trataran a nosotros, estaremos dando un gran paso para cuidarlos y conservarlos.
Las piezas son robustas, de madera natural sin barnizar y con acabados de excelente calidad. Tienen el espesor suficiente para que se sostengan de pie con facilidad y un tamaño ideal para que las pequeñas manitas puedan manipularlas fácilmente.
Este conjunto me gusta muchísimo porque todos sus elementos son de madera, porque son bonitos y porque tienen “alma”….Es un material inspirador, que dará muchas horas de diversión a través del juego simbólico o la creación de mini mundos. Sé que estas piezas no se romperán con los años, todo lo contrario, se harán más bonitas con el paso del tiempo y serán muchos los peques que disfruten de ellas inventando un sinfín de historias.