Si eres una mami primeriza y te han regalado una no te preocupes, ha llegado el momento de conozcas todas las bondades de estas famosas gasitas.
La muselina es una pieza de tela muy fina y transpirable de hilo de algodón que pasa de ser una pieza desconocida a convertirse en tu ‘must’ (yo no me arrepiento de tenerlas y más bien siempre quiero más jeje :P)
Si bien antes eran conocidas por nuestras madres como ‘pañales de tela’ ahora dejaron de ser aburridas piezas de tela blanca para convertirse en muselinas de gran tamaño, ligeras, suaves, de excelente calidad y con miles de usos prácticos ¡Sirve para casi todo!
Ahora seguro os preguntáis, ¿Qué uso le doy yo a la muselina? Pues montones, cada día descubro uno nuevo..
Para cubrirme dando el pecho
Para enrollar al bebé (aunque a Santiago nunca le gustó)
Para la silla y el capazo en verano a manera de sábana.
Como manta de juegos para el césped.
Para cubrir la silla de paseo cuando el bebé se queda dormido en la calle.
Para dar sombra al carrito del bebé (a veces funciona mejor que la misma sombrilla).
Para limpiarle la boca o lo que sea necesario.
Como toalla para la piscina o playa
Para cubrirle en verano en sitios con aire acondicionado
Patricia de mimuselina.com con esta imagen no los explica fenomenal!! ¡MIL USOS! ¿Habéis visto sus creaciones? Estoy segura que cualquiera (o todas) serán mi próxima adquisición jeje :P
La muselina se ha convertido en mi indispensable. En ese artículo del bebé que por nada del mundo se me puede olvidar cuando salimos de casa. ¡Lo recomiendo al 100%!
¿Y vosotras, le dais algún otro uso a las muselinas?