Javier de mayor quiere ser cocinero. De hecho ha demostrado sus dotes en el programa de TVE Master Chef Junior. Es de Almería y hace unos días habló con un compañero de la redacción de TUMINIYO. Habló de su paso por el programa y compartió con todos nosotros la receta de su plato estrella: la ‘milonadilla’.
UN COCINERO CON MUCHO DESPARPAJO
¿Qué recuerdos tienes de Master Chef Junior?
La experiencia en Master Chef Junior fue genial. Sobre todo cuando hemos salido a lugares como el Bio Park… allí vimos muchos animales. Y hace unos días hicimos una quedada en Avilés. De los dieciséis concursantes fuimos doce y lo pasamos muy bien. Pero la experiencia del programa me gustó. Lo que menos fue la final, yo creía que iba a ganar Paloma porque cocina mejor. Me quedo con la experiencia.
Tu fuiste seleccionado en un casting al que se presentaron 6000 niños y niñas de toda España.
Si, entre los seis mil a mi me cogieron para participar en el programa junto a otros quince niños y niñas.
¿Qué plato preparaste para convencer al jurado?
Hice las milonadillas. Una fusión de milhojas y empanadillas. Está hecho con pisto y sardinas maceradas.
Y lo de salir en la tele ¿qué tal?
Muy bien. En el plató había muchas cámaras y muchos micrófonos y se equivocan mucho.
Lo explicas muy bien. Parece que lleves toda tu vida cocinando, pero has aprendido hace relativamente poco tiempo.
Yo no sabía cocinar. Me gustaba pero no sabía. Me apunté a unas clases de cocina en Tu Chef Talleres para aprender.
Y ahora, en casa ¿qué te gusta cocinar?
Todo, hasta el brócoli que no me gusta comerlo. Si tengo que cocinar algo…cocino lo que me pongan, ¡lo que me pongan! Además, yo soy de los que comen mientras cocinan, así que siempre tengo la precaución de reservar bastante para poder emplatar, porque si no, me lo como todo.
LA RECETA DE LA ‘MÍTICA MILONADILLA’
¿Cuál es tu especialidad?
Está claro, las milonadillas.
¿Nos darías la receta?
Claro, no tengo ningún problema. Tiene la forma de una milhoja pero en realidad es una empanadilla. Se empieza preparando un pisto con verduras. Luego maceramos las sardinas y quitarles las espinas. A continuación cogemos las obleas de las empanadillas y las freímos.
Para emplatar ponemos sobre una oblea el pisto, luego las sardinas maceradas, laurel, un poquito de queso parmesano y tapamos con otra oblea. ¡Pero sin aplastar que se rompen las obleas! Sobre la última oblea ponemos un poco de pimiento del piquillo, sardina y dos huevos de codorniz.
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