Hay alimentos vetados
En relación a las comidas, es donde las embarazadas encuentran mayores restricciones. Hay alimentos y sustancias directamente vetadas, como el caso de la nicotina o el alcohol. Más en un segundo lugar la cafeína, no es muy recomendable, pero se puede hacer excepción, y aquellas comidas que pueden provocar infecciones graves al feto, como algunos tipos de quesos o carnes rojas.Si ya es difícil poder llevar a cabo una dieta equilibrada en casa, cuando hay que comer fuera del hogar, esto resulta un triunfo para muchas mujeres. Nuestra jornada de lunes a viernes está repleta de ‘tentaciones’ e ‘improvistos’ de tipo gastronómico.
Snacks saludables en el trabajo
En el trabajo, antes te daba por picar entre horas o te apetecía recurrir a la siempre suculenta, pero nada sana, comida rápida. Esto, solías hacerlo sin mayor remordimiento que el típico de ‘tengo que empezar a ir al gimnasio’ o ‘ya lo quemo trabajando’. Sin embargo, ahora ya no va a ser una simple cuestión de kilos o estética. Estamos hablando de cuidarte la salud, porque llevas una vida dentro, así que empieza cuanto antes a cambiar esos hábitos, por otros más saludables. La fruta, los tentempiés sin grasas o aditivos, son mucho mejores.
En los bares, evita los fritos
Si eres de las que 'te apuntas a un bombardeo' y te encanta eso de comer fuera o irte de bares a probar toda clase de pinchos, no tienes por qué dejar de hacerlo. Se trata ahora, de comer con más cabeza y selección.Di no a los fritos. No aportan nada más que calorías y son bastante indigestos. Mejor haz de tus platos principales la verdura, legumbres, el pescado y la carne a la plancha.Es importante no sólo cuidar el plato principal, sino la guarnición que nos ponen en él. Mejor opta de nuevo por ensalada o verduras. Aunque, si no has pasado la toxoplasmosis, mejor que éstas últimas estén muy bien cocinadas.
El alcohol, nunca recomendable
Con el alcohol, como sabes, hay que ser tajante. Ningún experto va a recomendarte tomarlo, ni siquiera una saludable copa de vino.Esto no quiere decir que un vasito de alcohol pueda afectar de primeras a tu bebé, pero como sabes, hay estudios que reflejan que el feto es especialmente sensible a esta sustancia, como ocurre con el tabaco, las drogas o el mismo café.Por ello, elige zumos y refrescos en los bares. No sólo estarás velando por tu salud y la de tu niño, estarás evitando un posible riesgo para tu bebé. !Son solamente nueve meses! Si lo piensas, tampoco son tantas las trabas que tienes para irte a comer fuera y pasar un buen rato en familia, o entre amigos. Sencillamente hay que estar más alerta, leer bien la carta y lo que vamos a ingerir, y tener un poco de fuerza de voluntad. !Vale la pena!