Desde hace un mes estoy tratando de que en esta casa se coma de manera sana. No es que antes no fuese así (bueno, un poco si) pero en la medida de lo posible estoy tratando de que la Princesa y el Santo coman verdura todos los días. Y haciendo el pollo así, es una manera rica de comer berenjena. La receta es del libro Cocina Sana para disfrutar de Isasaweis. Si estáis interesados en comprarlo, merece la pena, lo podéis hacer aquí.
Vamos a por la receta:
INGREDIENTES
4 filetes de pechuga de pollo
1 berenjena mediana
8 cucharadas de tomate frito
1 bola de queso mozzarella
queso parmesano rallado
orégano
sal
pimienta
PREPARACIÓN
Vamos a comenzar preparando todos los ingredientes. Por una parte, despojamos al pollo de la posible grasa que tenga adherida. Salpimentamos y reservamos.
A continuación, ayudándonos de un cuchillo bien afilado o de una mandolina, cortamos la berenjena en finas láminas y la mozarella en rodajas un poquito más gordas y reservamos.
Preparamos una fuente de horno, untándola con un poco de aceite para evitar que se peguen la berenjenas, y hacemos cuatro montaditos, con el siguiente orden:
- una capa de berenjena (se pueden poner dos solapándose un poco para que sea más consistente)
- una capa de tomate frito
- Orégano espolvoreado
- filete de pollo
- mozarella
- queso parmesano
Cuando tengamos las cuatro montañas listas, las metemos en el horno, precalentado a 180º, con calor arriba y abajo, durante 25 minutos y ¡¡a comer!!
¡¡FELIZ VIERNES!!