Menudo fin de semana reivindicativo: día del trabajo, día de la madre y ayer también día mundial de la libertad de prensa. Muchas cosas que celebrar, o no. Para muchos no, pero eso es como el que ve el vaso medio lleno o medio vacío. Yo siempre medio lleno y, por supuesto, si que celebro. Celebro tener un trabajo que me permite llegar a fin de mes, sin grandes pretensiones, pero me alcanza. En otros años hubiera ganado mucho más por el mismo trabajo, pero es la época que nos ha tocado vivir y hay que aguantar para salir del bache. Y aunque no tuviera trabajo, también lo celebraría porque, a Dios gracias, tengo capacidad de buscarlo. Estoy sana, estoy en plenas facultades físicas y mentales y ganas de trabajar. Seguro que algo encontraría. Precario o no, pero eso es otro tema. Pero seguro que en algo ocuparía mi tiempo.
Por otro lado, el día de la madre. En estos tiempos más que nunca debemos reinvindicar el papel de las madres en las familias. La sociedad que nos rodea nos ha convertido en una especie de superwoman, aunque no lo seamos. Queremos llegar a todo, porque tenemos el patrón de nuestras madres que si lo hacían. Pero con una salvedad, muchas de ellas no trabajaban fuera de casa y, en caso de que así fuera, no se les exigía tanto como a nosotras hoy en día. Hay que estar al 100% en casa, en el trabajo, con la familia, amigos, hijos y eso nos obliga a estar todo el día corriendo sin zapatillas. ¡Ole por nosotras!
Y finalmente, y eclipsado por un día de exaltación de la maternidad, ayer fue el día mundial de la libertad de prensa. Y eso si que es para celebrar. Por lo menos en España. Desde esta tribuna puedo gritar, reivindicar, exigir, criticar, ensalzar... sin miedo a ser condenada, encarcelada o, incluso, ejecutada. No nos tenemos que remontar a muchos años atrás para ver que en nuestro país esto antes no era posible. Y tampoco irnos a un lugar recóndito de la tierra para ver que todavía existen lugares donde esta libertad es una utopía. Así que viendo el panorama, también celebro este día.
¿Cómo se hubiera tomado la sociedad de otro tiempo o de otro lugar que una mujer ensalce su papel de mala madre (porque no soy superwoman y no puedo llegar a todo), recrimine en algún momento el papel de su marido en casa y exija más derechos en el ámbito laboral y personal? Prefiero no pensarlo que desde el viernes estoy de celebración.
¡¡¡FELIZ LUNES!!!