Está siendo un verano muy muy caluroso. Terrible, demasiados días a más de 30 grados, que para esta pobrecica gallega es como si la metiesen en un horno como si fuese un pollo asado. Todo el otoño invierno quejándome de la lluvia, de los temporales, del frío y la humedad constante... para llegar a echarlos de menos en pleno mes de julio. Qué complicado es aquello del justo medio.
Sin embargo, a pesar de las terribles condiciones meteorológicas que estamos sufriendo, está siendo un verano bastante bien aprovechado. Este fin de semana, sin ir más lejos, nos hemos ido a una playa fluvial cerca de Vigo {Ponte Caldelas para más señas, para aquellos que viváis por aquí, muy recomendable}. Con agua, los calores se sobrellevan mejor. Claro, el río no es el mar, el agua es mucho más fría, cosa que, hablando del océano Atlántico, no es moco de pavo. Pero los niños son completamente isotérmicos, no hay quien los saque del agua. Y al fin, de eso se trata, de que disfruten las vacaciones.
Yo encuentro muchas ventajas a las playas fluviales, dos superimportantes: suele haber muchísima menos gente que en la playa costera y, además, suelen estar en zonas de arboleda, con lo que yo agradezco la sombrita. Así que os podéis imaginar que en cuanto puedo, intento derivar los planes de refresque hacia este tipo de lugares...
Y al volver a casa, un heladito y todos tan contentos, ¿verdad?
Polos de Nutella
Ingredientes para 4 polos
200 ml de nata para montar {35% materia grasa}.
100 g de nutella {u otra crema de cacao}.
100 ml de leche {semidesnatada}.
Preparación:
1. Ponemos todos los ingredientes en el vaso de la batidora. Batimos bien, hasta que no haya restos de crema de cacao sin mezclar.
2. Repartimos la mezcla en los moldes para polos.
3. Guardamos en el congelador hasta que estén bien cuajados, lo mejor es dejarlos hasta el día siguiente.
4. Para desmoldarlos, los podemos mojar debajo del grifo, para ayudar a que salgan de los moldes.