¿Cómo hacer para que los programas de lucha contra la pobreza lleguen a quienes no logran beneficiarse normalmente? ¿Cómo mejorar la salud, nutrición y educación de los niños de los hogares que enfrentan las mayores desventajas? Una respuesta clave está en invertir en los niños para permitirlos superar la pobreza y acceder a mejores oportunidades.
Apostando a la educación
México lleva años persiguiendo mejores niveles educativos para las nuevas generaciones. La matrícula en la escuela primaria es prácticamente universal, incluso para los niños provenientes de las familias más pobres. Sin embargo, la deserción escolar a partir de la secundaria es todavía muy alta. A menudo, los jóvenes abandonan su educación porque no cuentan con los recursos suficientes para cubrir los gastos del transporte o de materiales. Esto resulta paradójico en la ciudad, donde el beneficio de tener mejor preparación académica es mayor, porque existen más oportunidades reales de trabajos remunerados.
Tomando en consideración esta realidad, hace casi 10 años el Programa de Inclusión Social PROSPERA, que lidera las transferencias monetarias condicionadas en México, modificó la estructura de sus apoyos educativos para los niños de las ciudades. Eliminó las becas en la etapa de educación primaria y lo aumentó un 25% para los alumnos de los seis cursos posteriores a este ciclo, equivalentes a Secundaria y Preparatoria. El ajuste de la cantidad a entregar se hizo de manera que no afectara a los presupuestos totales del programa.
Resultados de un reciente estudio publicado por el Banco Interamericano de Desarrollo apuntan a que, en comparación con los estudiantes que siguieron el esquema de de apoyos tradicionales,
– los alumnos que se beneficiaron de esta medida innovadora mostraron tasas inferiores de abandono escolar
– aumentó un 33,5% la tasa de graduación del bachillerato
Se estima que por cada dólar invertido en el aumento de estas becas, los alumnos beneficiarios tendrán ingresos adicionales de más de dos dólares gracias a los mayores niveles educativos alcanzados…
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Fuente: María Caridad Araujo es especialista líder de la División de Protección Social y Salud del Banco Interamericano de Desarrollo.