Hablar de acoso tiene connotaciones negativas, nuestro pensamiento se traslada a circunstancias que no nos gustaría que pasaran. Por otra parte, el acoso es algo bastante “normal” y “habitual“.
Cuando éramos pequeños las patadas, zancadillas, empujones estaban al orden del día. Cualquier situación chocante o cómica se podía convertir en un aluvión de risas, collejas, palmadas o tirones de oreja.
Hoy en día estos actos se han trasladado a las redes sociales y a los programas de mensajería. Estar tantas horas detrás de “las pantallas” en comunicación constante con nuestros “amigos” puede dar lugar a todo tipo de situaciones. Actualmente es mucho más fácil y sutil acosar utilizando estos medios, detrás de un dispositivo, que cara a cara.
Sabemos que cuando un menor es acosado, los síntomas más significativos son:
tristeza, que puede convertirse en ansiedad (miedo anticipado)
aislamiento, se encierra en su habitación y no quiere salir, no quiere hablar con nadie
perdida del apetito
Este tipo de situaciones generan una baja autoestima. Muchas veces los miedos aparecen motivados por complejos o sentimientos de inutilidad.
Hay más cosas que nos asustan que cosas que nos hieran verdaderamente, y sufrimos más en la imaginación que en la realidad (Seneca – Filósofo)
La mejor forma de apartar las preocupaciones es tener ocupaciones, ser activo. Tener la mente ocupada en cosas productivas para no divagar en miedos absurdos (aficiones, hobbys, deporte, lectura, …). Saber introducir en nuestra cabeza una cierta ingeniería de mensajes positivos y realistas, que neutralicen ideas negras y recuerdos nefastos (Enrique Rojas – Psiquiatra)
Otro consejo de siempre es evitar la replica. No se trata de contar hasta 10, se trata de NO contestar y olvidarse. Ya lo decía San Josemaría: De no hablar no te arrepentirás nunca.
De todas formas si la cosa se sale de quicio y se convierte en un calvario, existen distintos canales para protegernos. En el blog hemos comentado algunas webs y hemos hecho recomendaciones: guardar toda la información, diálogos, mensajes, fotos, … que han provocado el acoso.
Hoy presentamos Parentalclick Esta app permite obtener pruebas legales y legítimas en caso de proceso judicial.
Esta aplicación busca que los niños (texto copiado de chaval.es)
Piensen antes de publicar
Eviten acceder a contenidos inapropiados
No compartan datos familiares o imágenes que le puedan perjudicar hoy o en el futuro
Pacten los límites y normas de uso del móvil con vosotros
Dándoos su consentimiento podréis obtener pruebas legítimas de los hechos para imponer su cese inmediato a los responsables de un posible caso de acoso o ciberdelito
Entrada en chaval.es de Parentalclick: http://www.chaval.es/
Web oficial de Parentalclick: https://www.parentalclick.com/