Sí, hay profesores a los que les da igual el acoso escolar
Sé que puede resultar muy duro leerlo, pero en ocasiones es así. Hay profesores que no se preocupan por el acoso escolar. Ni siquiera se esfuerzan por hablar con los alumnos, en llamar al orientador/psicólogo y en reunirse con los padres. Simplemente, lo ven y giran la cara. “Aquí no ha pasado nada” o “son cosas de críos” se dirán. Pero obviamente, no son cosas de críos. Estamos hablando de maltratos, de burlas y de agresiones. ¿Todos los docentes deberían evitar y parar estas situaciones? Desde luego que sí.
Estoy un poco cansada de ver a profesores que desempeñan un rol pasivo e indiferente en la educación. Docentes que se encogen de hombros cuando un estudiante está insultando a otro y pasan de largo. Profesores que no dan lo mejor de sí mismos para evitar el acoso escolar y que no se esfuerzan en trabajar valores en el aula con los estudiantes para fomentar el compañerismo y el trabajo en grupo. Sí, les da prácticamente igual. Y cuando se reúnen con los padres muestran la misma actitud de pasotismo.
Docentes que niegan la ayuda a los estudiantes
Hace un año, un vecino que asistía a primero de la ESO, avisó a su tutor de que sus compañeros se estaban metiendo con él, que le habían pegado y que tenía mucho miedo de unos “compañeros” en concreto. Cuando mi vecino se lo contó también a sus padres, les confesó lo que había dicho su profesor: “¿y tú qué has hecho?”, “es mejor que te peguen porque así te haces más fuerte”, “de todos formas, a mí no cuentes tú vida”. Yo estaba alucinada cuando me lo contaron. Finalmente, los padres se reunieron con el profesor.
Pensaban que su hijo no decía la verdad y que estaba exagerando. Pero cuando hablaron con él se dieron cuenta que el niño no había mentido en absoluto. La administración del colegio no hizo absolutamente nada. Le quitaba mucho hierro al asunto. “Es que son cosas de niños”. “Es que es normal que se peleen de vez en cuando”. ¿Pero cómo va a ser eso normal, señores y señoras? ¿Y cómo puede cubrir la dirección y la jefatura de un centro cubrirse de esa mala manera?
Estudiantes que se cambian de centro sin tener que hacerlo
Después de que mis vecinos hablasen con el profesor en concreto, con el psicólogo y con la directora, todo seguía igual. No mejoraba absolutamente nada. Incluso el acoso escolar se intensificó hasta que los padres decidieron cambiarle de centro. Me parece increíble que en un colegio o instituto haya profesores que no luchen contra el acoso escolar. Pero me decepciona aún más que la dirección no tomara medidas en el asunto. ¿Por qué los directores y los jefes de estudio defienden tanto a docentes que no lo merecen?
Sinceramente, no tengo respuesta a esa pregunta. Lo que sí sé es que el alumno tuvo que abandonar el centro. Por una parte, me alegré de que los padres alejaran al niño de ese ambiente y clima. Pero por la otra, me enfadé. Me enfadé muchísimo. ¿No se debería haber despedido al profesor en concreto? Por supuesto que sí. Pero para muchos centros, lo importante es el prestigio. Y prefieren no hacer nada antes de manchar su nombre con acusaciones de acoso escolar.
Profesores activos, con empatía y que escuchan
Hay una cosa que se olvida continuamente. Ser maestro o profesor no significa únicamente transmitir conocimientos y listo. No significa impartir una lección, mandar deberes y listo. Ser profesor y maestro significa esforzarse por comprender y entender a los estudiantes. Significa escucharles, ayudarles y apoyarles. Y por su puesto luchar contra el acoso escolar en su centro. Desgraciadamente, hay muchas personas (incluidas los propios profesores y directores de centro) que la labor docente es simplemente explicar y corregir.
¿Si los estudiantes se llevan mal entre ellos? No tenemos que hacer nada. ¿Si hay un alumno que ha pegado a otro? Toda la culpa de eso es de los padres, y, por lo tanto, se tienen que ocupar ellos. ¿Por qué no tenemos en cuenta la educación emocional en las aulas? No, no. De eso se tienen que encargar en casa. Y luego, parte de la sociedad se lleva la mano a la cabeza cuando leen o escuchan los índices de acoso escolar en España. Lo que yo no sé es de qué se sorprenden. Con el sistema educativo que tenemos…
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