Los techos verdes, azoteas verdes o ajardinadassurgieron alrededor de los años 60, pero pese a su belleza y beneficios no se popularizó su uso. Recién a partir del año 2010 y de la mano con los avances constructivos, el crecimiento económico y la preocupación por el medio ambiente, se está retomando el concepto.
Un techo verde, es el techo de un edificio que está parcial o totalmente cubierto de vegetación, ya sea en suelo o en un medio de cultivo apropiado, no en macetas. Los Techos Verdes hacen uso de técnicas modernas para mantener vegetación en un medio donde no lo había.
Imágenes tomadas de http://distrends.com / www.veoverde.com
Reduce el CO2 y libera oxigeno, 1 m² de área verde genera el oxígeno requerido por una persona en un año.
Filtra contaminantes del aire, 1 m² de área verde atrapa 100 ? 150 gramos de polvo por año.
Mejora la climatización del edificio, manteniendo el calor durante el invierno y el frío durante el verano, por lo cual reduce el consumo de calefacción y aire acondicionado.
Actúa como barrera acústica, el suelo bloquea los sonidos de baja frecuencia y las plantas los de alta frecuencia.
Retiene las aguas pluviales. Imágenes tomadas de http://www.decocasa.com.mx
¿Qué se requiere para tener un techo verde?
Las azoteas o techos deben contar con un sistema estructural que soporte el peso del suelo y la vegetación, por ello no podría ser aplicado en muchos edificios existentes.
El diseño de un techo verde contempla un sistema impermeabilizante del techo a fin que la vegetación, su drenaje, raíces y los componentes de la tierra no afecten su estructura.
¿Cuánto cuesta tener un techo verde?
El costo de instalación de un techo verde es de un 25 a un 50% más alto que el de un techo tradicional, sin embargo puede considerarse una excelente inversión por los múltiples beneficios que otorga, principalmente el de transformar un espacio que muchas veces es perdido en un área de encuentro y esparcimiento familiar, de belleza y preocupación por el medio ambiente.
¿Te animarías a tener un techo verde?
Gracias a Zena, por inspirar esta entrada.