Un aumento en la temperatura corporal del niño es el primer signo que alerta de que algo no va bien y es probable que se esté iniciando un proceso infeccioso. Cuando se acuda con el pequeño al pediatra, éste necesitará saber la fiebre exacta que tienen el niño, por eso, contar con un termómetro que nos dé la garantía de ser exacto, es fundamental.
Desde que, hace unos pocos años, se retirara del mercado por ser demasiado tóxico y dañino para el medio ambiente, el termómetro de mercurio, es posible comprar termómetros de distinto tipos y, en función de cada caso, interesará más utilizar uno u otro: de cristales líquidos, de galinstan y digitales (que pueden ser los digitales estándar, infrarrojos o de chupete).
Termómetro para bebés de galinstan
Debido al potencial peligro que supone el uso de termómetros de mercurio, estos se están sustituyendo por termómetros de galio o galinstan. Estos termómetros contienen una mezcla de estaño, indio y galio. En caso de rotura accidental, se puede limpiar el vertido con un trapo y deshacerse de él, tirándolo directamente al contenedor de basura sin que suponga ningún riesgo ni para el medio ambiente ni para la salud.
Este tipo de termómetro es higiénico.
Podéis haceros con el vuestro por menos de seis euros en este enlace.
Termómetro para bebés de rayos infrarrojos
Si algo caracteriza a los termómetros de rayos infrarrojos, es su rapidez, en tan sólo unos segundos, muestran una medición exacta.
No son invasivos, son indoloros y se pueden utilizar de manera sencilla incluso con recién nacidos.
Los termómetros de rayos infrarrojos no necesitan contacto y miden la temperatura a través de un puntero. A este tipo de termómetro, es común denominarlo termómetro láser, pero es un error porque la asistencia de láser, en algunos termómetros de este tipo, es para apuntar mejor hacia el lugar de medición, pero no para tomar la medida.
Una de las ventajas de estos termómetros es que pueden usarse incluso con el bebé dormido. Los termómetros de oído miden la temperatura a través de unos sensores que miden la temperatura del canal auditivo. Generalmente, estos termómetros también permiten hacer mediciones en la frente e incluso pueden usarse para tomar la temperatura del agua del baño o de la comida del bebé (termómetros multifunción).
Os indico varios enlaces donde adquirir termómetros de este tipo:
Liqoo LCD Digital. Termómetro infrarrojo para adultos, niños y bebés que no necesita contacto. Fácil de usar, rápido y preciso tanto para temperatura corporal como de objetos.
Kovira Medical Infrarrojo. Ideal para tomar mediciones en frente, oreja, objetos y ambiente.
Termómetro para bebés digitales
Los termómetros digitales estándar son tan fiables como los termómetros infrarrojos, pero su precio es inferior.
No son tan rápidos como los de rayos infrarrojos, en lugar de segundos, necesitarán un par de minutos para medir la temperatura y es necesario el contacto.
Según su uso pueden ser rectales, axilares u orales:
Uso axiliar. Es fácil y seguro. La axila debe de estar bien seca para hacer la medición.
Uso rectal. Existen termómetros especiales diseñados para este tipo de uso, tienen una punta flexible y un mango para no tener que insertar el termómetro más de un par de centímetros. Esta forma de medición es de las más fiables.
Uso oral. Se coloca debajo de la lengua con la boca cerrada.
Por menos de 10 euros podéis adquirir termómetros de este tipo. Os dejo enlace a estos dos termómetros digitales estándar, termómetros buenos, bonitos y baratos:
California Basics. Para toma axilar, oral y rectal. Lectura en 15 segundos.
Hilogy. Termómetro rápido que mide la temperatura de manera oral, axilar y rectal.
Termómetros de chupete
Los termómetros de chupete son perfectos para los lactantes pues se toma la temperatura sin causar incomodidad al pequeño. Indican la temperatura en su pantalla digital. Son adecuados para usar desde el nacimiento.
Los podéis comprar en estos enlaces:
Reer 9633. Este termómetro chupete mide la temperatura en 3 minutos y cuesta menos de 10 euros.
Tera con forma de chupete. Termómetro electrónico con pantalla LCD, tiene un precio de lo más competitivo.
Termómetros de cristales líquidos
Son los menos fiables y su medición es sólo orientativa. Se basan en una escala colorimétrica que adquiere un color u otro dependiendo de la temperatura.
Podéis verlo en el siguiente link:
Formato tira para niños y bebés. Se trata de un termómetro reutilizable.
Recomendaciones finales sobre el uso del termómetro para bebés
Si tienes un termómetro de mercurio, es mejor que te deshagas de él, el mercurio puede evaporarse o ser ingerido por el niño si se rompe.
Si es un termómetro de contacto, imprescindible limpiar y desinfectar la parte del termómetro que va a tocar el cuerpo del niño. Se usa alcohol antiséptico con el que se limpia el termómetro con la ayuda de una gasa.
Sea cual sea el termómetro elegido, siempre es necesario leer y seguir las instrucciones de uso.
Buen día a tod@s!!
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