Como much@s sabréis Mario es un cuento, pero por ello no va dirigido solo a niñas y niños, también va dirigido a los adultos, a la sociedad. Porque este cuento trata una realidad.
Si eres de los que creen que vivimos en igualdad, te debo de quitar la venda de los ojos, es una igualdad ficticia y nuestras hijas e hijos lo siguen sufriendo. ¿Cómo es posibles? Los niños nacen si prejuicios pero no crecen sin ellos. La sociedad los van corrompiendo. Y si, suena fuerte este termino de corromper, también podríamos utilizar el termino contaminar.
Prueba de ello, estos ejemplos:
Si le pongo algo rosa a mi hijo para ir al cole se reirán de él.
Iguamente, los niños no se pueden pintar las uñas.
Los niños no pueden jugar con muñecas.
Los niños no pueden llevar un bolsito. Y si lo lleva que sea rojo o azul.
A los niños no les puede gustar las películas de princesas. Solo de coches, monstruos, súper héroes, …
Las niñas quedan más monas en el baile del cole con falda. Van a ir todas con falda.
Las niñas no pueden pedirse un coche tele-dirigido para su cumple. O que raro, se ha pedido un balón de fútbol.
A las niñas las ponemos pendientes desde bebes pero a los niños no.
Ojala me dijerais que estas cosas no las habéis pensado o dicho alguna vez o no las habéis oído decir.
Por todo esto existe Mario. Y de hecho, Mario está basado en un niño de verdad, en un hecho real. Su autora Aida Muñoz tenía muy claro el mensaje que quería dar.
Tras crear su anterior libro ilustrado sobre igualdad llamado Felicidad, quiso ir más allá, queriendo crear un referente para todos los niños que quieren ser libres a la hora de elegir como vestir, a la hora de poder decir que color les gusta realmente, además de que puedan elegir libremente a que jugar, entre otras muchas cosas. Al final, a la conclusión a la que podemos llegar, es que la igualdad es libertad para tod@s.
¿Más cositas que os puedo desvelar?
Si os habéis fijado, hay un personaje junto al protagonista. Un personaje peludo y pequeñito que siempre le acompaña. En cada ilustración se muestra como un amigo que comparte la frustración, el enfado, la incomprensión o la alegría. Este pequeñín es WARADI.Al crear a Mario, lo primero que pensé, fue lo duro que podría ser para un niño el rechazo o los comentarios de los demás al no estar de acurdo con sus gustos. Y me pareció buena idea crear a un compañero que le fuera de apoyo. De hecho es como un amigo invisible, su consciencia, su pepito grillo, que le da fuerzas, le anima en los malos momentos y comparte los buenos.
El nombre de Waradi surgió en una de nuestras desenfadadas reuniones con nuestros hij@s en el burguer. Lo que quería era buscar un nombre que significara rosa, porque como habréis apreciado Waradi es de color rosa. Finalmente Aida dió con el nombre. Y con esto os revelo que Waradi es la pronunciación de la palabra en Arabe que se traduce como rosa.
Para finalizar os dire que es un cuento que he ilustrado con mucho cariño porque eso es lo que quiero transmitir a tod@s l@s niñ@s que lo lean y más aun a los que se sientan identificad@s, quiero mandarles cariño, mucha fuerza y autoestima.
Datos del cuento:
Si queréis conseguir un ejemplar de Mario estos son sus datos para poder encargarlo en vuestra librería de barrio:Título: Mario
Autora: Aida Muñoz
Ilustradora: Irene de la Calle
Editorial: Sar Alejandría
Formato: Tapa dura
ISBN: 9788417995096
Edad: 6 a 8 (Para todas las edades).
Contiene: Juego de Iguales.
Pero si por lo que sea, tenéis que comprarlo online, os dejo algunos Links:
www.editorialsaralejandria.com
Y hasta aquí el post de hoy, el penúltimo de este año, con un tema importante. Nos vemos el día 30. ¡Felices Fiestas creativ@s!