Sin embargo, esta gestación se interrumpe precozmente no llegándose a visualizar ecográficamente. Sólo se detecta en un test de embarazo en sangre. De aquí el nombre de embarazo bioquímico.
Hay 10 cosas importantes que debes saber acerca de un embarazo bioquímico:
1. Un embarazo químico es un aborto involuntario que se produce de forma temprana. Tan temprano, de hecho, que es posible que no supieras que estabas embarazada. Un embarazo bioquímico por lo general se produce en las primeras cinco o seis semanas de embarazo. Es decir, antes de tener lugar la primera ecografía.
2. Se llama un embarazo bioquímico, porque a pesar de su corta duración, el cuerpo produce una ‘química’ (es decir, una hormona) llama HCG. Si haces una prueba de embarazo en casa es posible que consigas un resultado positivo. Es la provocada por la hormona HCG.
3. Un embarazo bioquímico sigue un patrón tristemente similar. Después de la prueba positiva inicial, el sangrado menstrual comienza pronto. Al hacer una segunda prueba posterior, el resultado ya es negativo. La hormona HCG ha caído en picado. Es una situación desagradable si tenías esperanzas de quedarte embarazada.
4. Los pacientes que se someten a un tratamientos de fertilidad conocen más acerca de los embarazos bioquímicos que las mujeres que conciben de forma natural. Esto es porque se hacen el test pasados de 12 a 14 días después de la transferencia de embriones. Mientras, la mujeres que no se someten a una FIV sólo piensa que su regla se retrasa.
5. Un embarazo bioquímico no siempre tiene síntomas. Es posible que tenga algunos calambres, un poco de sangrado antes de la purga “principal”. O simplemente que no se tenga ningún síntoma.
6. Alrededor del 50 por ciento de los primeros embarazos termina en un embarazo bioquímico. La causa suele ser una anomalía cromosómica en el embrión. Los desequilibrios hormonales y problemas de coagulación sanguínea también pueden causar un embarazo bioquímico.
7. Muchas mujeres que han pasado por un embarazo bioquímico consiguen quedarse embarazadas de forma natural. En caso de varios abortos involuntarios y repetidos, te recomendamos que acudas a un especialista para que analice con más detenimiento tu caso.
8. En términos generales, no se pueden evitar los embarazos bioquímicos. Dicho esto, una buena dieta y ejercicio regular son una buena idea si estás tratando quedarte embarazada. Dejar de fumar, el alcohol y la cafeína. Y reducir el estrés.
9. Si finalmente se consigue una implantación, es posible que aparezca sangrado una o dos semanas antes de la hemorragia de un embarazo bioquímico. No hay que confundir los dos sangrados. El sangrado temprano no siempre significa aborto involuntario.
10. Es recomendable que, ante cualquier síntoma de embarazo, y más si ha sufrido algún tipo de aborto involuntario, se realice una ecografía para descartar un embarazo bioquímico u otro aborto involuntario. Aunque el sangrado, y la caída de las tasas de HCG, son una buena indicación de que el embarazo no ha seguido adelante, una ecografía es concluyente.
Una reflexión final. Cada vez que se produce un aborto involuntario, siempre es devastador para la mujer y la pareja. Un embarazo bioquímico sigue siendo un embarazo esperado y se tiene todo el derecho a sentirse triste si se produce. Pero recuerda: los abortos involuntarios son sorprendentemente comunes. Un futuro embarazo es perfectamente posible.
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