Ya no trabajo en las aulas pero tengo amigos que sí lo hacen y que llegan a casa totalmente decepcionados por la falta de empatía de la sociedad. Por no hablar, obviamente, del sueldo, de tener a más niños en el aula de los que se debería… ¿Sabíais que hay educadores infantiles que son responsables de veinte niños de uno a dos años sin casi ayuda? Os podéis imaginar, si ocurre algún tipo de accidente (por pequeño que sea), a quién van a culpar.
Sé que hay educadores infantiles que lo están pasando mal. Por eso hoy, se me ha ocurrido escribir sobre esas cualidades geniales que tienen. Posiblemente, me digáis que no todos los educadores infantiles son geniales. Por desgracia, no. ¿Pero de qué sirve si nos centramos siempre en lo malo y no reconocemos ni valoramos lo bueno? Hay profesionales increíbles, muy cualificados y que se implican muchísimo con los niños y con sus familias. De ellos vamos a hablar en el post.
#Los educadores infantiles siempre buscan la sonrisa de los peques
Cuando hice las prácticas de educación infantil, mi sentido del ridículo estaba por los nubes. Cuando mi tutora me dijo que teníamos que disfrazarnos para interpretar una obra de teatro casi me dio un síncope allí mismo. ¿Disfrazarme? Voy a montar un espectáculo. Y vaya si lo monté. Un espectáculo precioso de carcajadas y aplausos de los peques. Desde ese momento, perdí toda la vergüenza y me di cuenta de lo sencillo que es hacer feliz y sonreír a un niño pequeño. Sí, los educadores infantiles siempre vamos a hacer sonreír a los peques.
#Creativos, entusiastas y llenos de ilusión
Cuando trabajaba en centros educativos era un peligro salir de compras con otro educador infantil. ¿Sabéis por qué? Porque nos fijábamos más en los materiales para hacer manualidades con los peques que en otra cosa. Y ahora, cuando acompaño a alguna amiga es igual. Se lleva rotuladores concretos, folios de colores, purpurina, pegatinas para decoración… Y con eso, su cabeza ya está dando vueltas para hacer alguna actividad divertida con los niños. Lo mejor es ver su cara de ilusión y entusiasmo al prepararlo todo. ¡No tiene precio!
#No les importa hacer horas extras para preparar dinámicas molonas
El otro día, me llamó un amigo y nada más coger me dijo: ¿te vienes a casa a preparar una dinámica de educación para los peques? Y me lo dijo con todo el amor de su corazón. Recuerdo haberme quedado en el centro dos horas más para tener perfecta la actividad de al día siguiente. O de hacer manualidades los sábados y los domingos para hacer con los niños. O de coser algún disfraz casero para hacer obras de teatro improvisadas. Y tengo que reconocer que he disfrutado un montón con esas horas extras.
#Apoyan todo lo que pueden a las familias
Siempre me ha gustado decir que los educadores infantiles no solo se implican con los niños si no también con las familias. Los educadores siempre están dispuestos a responder y a escuchar las posibles dudas de los padres y ayudarles en todo lo que puedan. Yo he tenido la suerte de conocer a familias increíbles que se han dejado asesorar en los aspectos educativos de sus hijos y que de verdad se han implicado en el día a día. Creo que los educadores infantiles siempre están ahí para echar una mano en lo que haga falta.
#Sí, se preocupan muchísimo por el bienestar de los niños
Me he visto en montones de situaciones en los que he tenido a niños con fiebre en el aula y lo he pasado realmente mal. Me preocupaba un montón por ellos y de que estuvieran lo más cómodos posibles. Los educadores infantiles no somos enfermeros pero yo he tenido que poner cientos de veces el termómetro y dar medicina a los peques cuando estaban malitos. Además, están muy pendientes de que el aula sea el lugar más adecuado para la estimulación y la expresión de los más pequeños.
#Se toman muy en serio su trabajo
Los educadores infantiles saben perfectamente que no son simples cuidadores ni recogeniños. Ellos tienen muy claro que su trabajo es educar y estimular a niños de 0-6 años. Son conscientes de que en parte, gracias a ellos, esos pequeños van a ser grandes personas en un futuro y se esforzarán al máximo por dejar una huella imborrable en el corazón de los niños. Los educadores infantiles son profesionales increíblemente responsables que se implican al máximo en la educación.
#Son fuertes y no se rinden a pesar de todas las adversidades
A pesar de no contar con casi ninguna ayuda en el aula y de que su profesión es muy infravalorada, ellos no se rinde. Los educadores siempre están al pie del cañón superando las adversidades y los obstáculos. ¿Y por qué? Porque les importan de verdad los niños y sus familias. Y aunque, la educación infantil sea una etapa a la que casi no se presta atención y casi no se tiene en cuenta, ellos no van a huir. No se van a mover del sito por muchas tormentas que existan.
#Echan de menos a los peques a pesar de estar super cansados
El año pasado por estas fechas, una amiga me dijo: jo, Mel, estoy agotada. Necesito vacaciones y desconectar un poco de los niños”. A los quince días de empezar las vacaciones me comentaba: “creo que voy a comprar estas cosas para el comienzo de curso”, “he pensado en una bienvenida genial para cuando vuelvan los peques”, “jo, Mel, es que se me hace muy raro no ver sus caritas de sorpresa y sus sonrisas”. Y yo sinceramente, comprendía todo lo que me decía porque también me pasaba a mí.
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