El dia de hoy estaremos hablando de cuales son las mejores formas para identificar el llanto de tu bebé, cada bebé es diferente, tú bebé es único, tiene necesidades propias y su temperamento es uno de los factores más diversos en él. Mientras que algunos lloran por pequeños períodos de tiempo durante todo el día hay otros que lo hacen solamente en la noche. Conforme pase el tiempo aprenderás a identificar que cada bebé tiene un llanto diferente, y por el hecho de ser su medio de comunicación, cada bebé transmite diferentes mensajes de acuerdo al llanto que presenta. Así que tranquila que si tu pequeño tiene hambre o requiere de cambio de pañal seguro te lo hará saber con un buen llanto.
Ahora debes de entender que el llanto también varía de acuerdo a la etapa que tu pequeño este atravesando. Normalmente durante las primeras 6-7 semanas de nacido tu bebé comienza a desarrollar un sentido de comprender que es lo que está pasando en su entorno, con que personas se relaciona y que cosas hace, por lo que es en este momento que comienza a dejar un poco, y repito solo un poco el llanto. Además de que tú como mamá o papá seguro que a esta altura ya logras diferenciar su llanto. Es a partir de este momento que el bebé asocia el llanto a una forma de expresión para comunicar sus deseos o más bien dicho sus demandas, por lo que aparecen otros tipos de llanto diferentes al de cuando era un recién nacido.
1. Llanto de soledad
Conforme tu bebé vaya creciendo necesita encontrarse en constante movimiento desarrollando actividades de aprendizaje, sin embargo, ningún humano nacimos para estar solo, por lo que tu bebé se siente triste al ver que no juegas con él o que al momento de hacer alguna tarea lo dejas solo en su cuna o en la cama, ya que son lugares en los que no encuentra mucha diversión. Por lo que es recomendable que mientras realizas tus actividades cotidianas tengas presente a tu bebé, esto lo hará sentirse seguro e integrado, lo que lo ayudará a desarrollarse socialmente.
2. Llanto de enojo y frustración
La mayoría de las veces al estar interactuando con su entorno el bebé se enfrenta a dos situaciones muy molestas para él: la incapacidad que aún tiene para utilizar ciertos objetos que le llaman la atención y las muy famosas “prohibiciones de mamá” mejor conocidas como: “¡Eso no se toca!" Este llanto es producido por la mezcla de sentimientos que tu bebé tiene al sentirse limitado por sus capacidades y por ti. Por lo que es recomendable que acostumbres el comprarle juguetes de acuerdo a su edad para que de esta forma no se sienta limitado psicológica e intelectualmente.
3. Llanto por miedo
La capacidad de aprendizaje de un bebé normalmente suele ser muy alta. Si realizas una acción una vez y tu bebé la ve, ten por seguro que la va a repetir e incluso la recordará con el paso del tiempo. Y así como tu bebé recuerda acciones también recuerda personas, objetos, etc. con los que pudo haber tenido una situación desfavorable, por lo que en cuanto lo ve en automático llora desconsoladamente.
4. Llanto por hambre
La alimentación de tú bebé es un factor de suma importancia y que con el tiempo se regulariza en un horario muy estricto. Por lo mismo en el momento en el que tu bebé empieza a sentir hambre te lo hará saber de una forma sutil, comenzando con pequeños quejidos que si no atiendes se pueden convertir en un verdadero drama de película. Intenta establecer un plan de alimentación en donde fijes la hora, el tipo de comida, la cantidad de comida que le das y la cantidad de comida que realmente come. Esto te ayudará a prepararte y ayudará a tu bebé a ir estableciendo una rutina alimenticia. Además, es muy común que antes de empezar a llorar los bebés crean señales con las que demuestran que tienen hambre, ya sea mordiendo su manita o sacando la lengua, por lo que debes de estar atenta a estos movimientos para evitar el llanto.
5. Llanto por sed
Cuando nuestros bebés son muy pequeños normalmente no les damos agua, y en cuanto los escuchamos llorar les damos un biberón con leche. Sin embargo, en muchas ocasiones es probable que lo que realmente tenga es sed. Y es que es una cuestión en la que no pensamos y por consecuencia es uno de los llantos más difíciles, tanto para el bebé como para la mamá. Te recomiendo que tengas jugos sin azúcar especial para bebés y agua simple a la mano, para que de esta forma cualquier imprevisto pueda ser atendido a la brevedad.
6. Llanto por cansancio
Estoy segura que te ha pasado que tu bebé está despierto y se la pasa lanzando sonrisas a diestra y siniestra y de pronto toda esa alegría se va y tu pequeño comienza a impacientarse y a quejarse, esto se puede deber a que tiene sueño por estar realizando actividades. Lo mejor que puedes hacer en esta situación es alejarlo del ruido y llevarlo a una habitación tranquila, con música clásica, un biberón con leche y su frazada, para darle la oportunidad de relajarse y dormirse por sí mismo. Sin embargo, si esto falla existen varias técnicas que puedes realizar para tranquilizarlo, tales como:
- Cantarle una canción de cuna mientras lo meces.
- Cada mamá tiene su propio arrullo y cada bebé identifica el de su mamá, por lo que se sentirá seguro y tranquilo.
- Pasearlo en su bolsa canguro para que sienta el contacto directo con la piel de su mamá.
¿Qué hacer cuando tu bebé llora?
Por muy difícil que lo parezca lo primero que debes de hacer es tranquilizarte. Tu bebé es capaz de sentir las tensiones en el ambiente, así que, si se siente en un entorno de paz y armonía, lo más probable es que se tranquilice más fácilmente. Si por el contrario tú te alteras y no sabes que hacer tu bebé lo percibirá y entrará en una tensión mayor. El llanto es la medicina del alma, si tu bebé comienza a llorar déjalo que llore por un pequeño periodo de tiempo, después tómalo en tus brazos, háblale con cariño y demuéstrale que estás ahí con él, ofrécele un biberón y pégalo contra tu corazón, recuerda que los bebés están familiarizados con el ritmo de tu corazón así que eso lo hará recordar el útero materno y sentirse seguro, tranquilo y amado. Si no puedes tranquilizar a tu bebé lo mejor que puedes hacer es dárselo a alguien más para que lo calme para no exasperarte.
Es muy importante que entiendas que un bebé no llora “por nada”, siempre existe alguna razón por la cual lloran. Si tu bebé está limpio, ya comió, parece que no le duele nada, ya durmió y continúa llorando significa que algo le está sucediendo y que puede ser para ti un poco difícil de identificar. Intenta hacerlo sentir abrigado, explícale que estás ahí, y que lamentas no poder aliviarlo, habla suave y tiernamente con él, muchas veces te extrañan y todo lo que necesitan es tener un poco de contacto corporal contigo.
La solución mágica no existe, con el paso del tiempo los bebés deben de aprender a manejar las situaciones frustrantes. Lo puedes ayudar animándolo cuando intente algo nuevo, alejándolo de lo prohibido con delicadeza y evitando castigarlo por tener curiosidad, lo cual es entendible a esta edad de experiencias y aprendizaje.
Te invito a leer más acerca de tu bebé en mi blog en donde encontrarás respuestas a las dudas que tengas acerca del desarrollo de tu bebé. ¡Hasta la próxima!