Lo necesitan ellos y lo necesitamos nosotros. Por eso de niños nuestros padres tenían que llamarnos para que volviéramos a casa mientras les pedíamos 5 minutitos más, por favor y por esa misma razón, hoy en día nos sigue sentando tan bien salir a la calle, no solo cuando nos sentimos estresados, sino cualquier día, sin importar las circunstancias.
Por eso hoy hemos querido dedicar un artículo a la importancia de que los niños pasen tiempo al aire libre. Disfrutando del entorno, desarrollando habilidades y destrezas, pasando tiempo con otros niños, pero también y, sobre todo, con vosotros ahora que son pequeños.
A continuación te contamos los beneficios de hacerlo y algunas ideas para que pasar tiempo fuera de casa sea algo entretenido para todos; grandes y mayores. ¡Acompáñanos!
6 beneficios de que los niños pasen tiempo al aire libre
Los psicólogos infantiles y pediatras lo tienen claro: un niño que pasa un tiempo de calidad en la calle, es un niño más feliz y te contamos los motivos:Mejoran su salud: ya que hacen más ejercicio físico y, además, el estar expuestos al sol (siempre con protección, claro está) les aporta vitamina D.
Mejoran su estado emocional: porque liberan el estrés del día a día, especialmente durante la época escolar. Hay que tener en cuenta que el estrés en los niños no se manifiesta de forma tan clara como en los adultos, pero esto no quiere decir que no esté presente.
Mejora su desarrollo cognitivo: ya que en la calle hay muchos más estímulos, más puntos en los que fijarse y diferentes formas de interactuar con lo que pasa a su alrededor. El desarrollo será uno u otro en función del momento vital del niño.
Desarrollan su imaginación: por la misma razón que decíamos antes que tenía más estímulos y esto también le permite vivir o revivir diferentes escenas en su mente.
Desarrollo de habilidades sociales: en el caso de que acuda a lugares donde tenga o pueda interactuar con otros niños o adultos que no sean los habituales de su entorno.
Descubren la naturaleza con sus propios ojos: y no hay nada más gratificante que aprender de forma directa; palpar nuevas texturas, sentir diferentes aromas, etc.
Como ves, pasar tiempo al aire libre tiene numerosos beneficios para los niños. Si, además, sois vosotros quienes le acompañáis en esos momentos, el efecto es todavía mayor y se mejoran los vínculos con ellos.
Actividades para disfrutar al aire libre y en familia
Escapadas a la montaña: hay muchas rutas preparadas para que los pequeños aventureros puedan, desde bien pequeños, disfrutar de la naturaleza que les rodea. No te olvides de llevar una fiambrera y una botella para que pueda reponer fuerzas y lo haga con sus propios objetos. Dependiendo de la edad que tenga, además, le encantará llevar su comida y agua en su propia mochila infantil, por lo que no pierdas la ocasión de enseñarle a responsabilizarse desde este acto tan sencillo.
Escapada a la playa: donde no puedan faltar los juegos en la arena y para ello será necesario que vayáis equipado con el set de playa que incluye pala, cubo y figuritas para decorar ese castillo que vais a hacer entre todos. ¿Te gustan las historias de aventuras, piratas, princesas y príncipes? Es el momento de demostrarle a tu peque que tú también tienes mucha imaginación.
De acampada en el jardín: o si tienes una terraza grandes, esto también te podrá servir para que paséis una noche contando cuentos, cenando al aire libre y disfrutando de las noches de verano, al cobijo de una tienda de campaña infantil que, por supuesto, luego podrás meter en casa y aprovecharla todo el año.
Ya ves que son 3 ideas muy básicas, pero observa todos los beneficios que llevarlas a cabo te aporta. Dime, ¿cuánto tiempo libre juntos vais a pasar este verano? Yo auguro que será mucho.
Fuente: este post proviene de Deco&Kids, donde puedes consultar el contenido original.
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