Nuestro cuerpo sufrirá significativos cambios, pero también tendremos cambios emocionales, en este artículo te ayudaremos a saber y conocer qué cambios cabe esperar cuando se está embarazada.
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Aquí encontrarás una guía de pies a cabeza de los cambios físicos y emocionales más importantes que el cuerpo de una mujer puede experimentar mientras está embarazada.
Cambios físicos en el embarazo
Es importante recordar que cada mujer es única y responderá de diferente manera al embarazo. Si se es primeriza, es normal que se esté más alerta ante cualquier cambio nuevo que se experimente.
Algunos serán difíciles de ignorar, como el aumento de volumen y peso, mientras que otros pueden ser más sutiles y es posible que ni siquiera sea consciente de ellos. Sin embargo, algunos cambios corporales pueden ser inesperados y sorprender a algunas mujeres.
Estrías
Los cambios corporales durante del embarazo que ocurren en la piel son muy comunes, pero los que tienden a ser más molestos para las mujeres son las estrías. Estas líneas rosáceas y violáceas aparecen normalmente en el abdomen, el pecho, los glúteos o los muslos y pueden provocar molestos picores.
Las estrías son más frecuentes en mujeres con un mayor peso o en las que sufren rápidos aumentos de peso durante el embarazo o si se tiene un feto grande. Pueden ser causadas por una descomposición del colágeno o tejido conectivo que sostiene la piel, en áreas donde se ha presentado un crecimiento rápido y se ha estirado.
Se recomienda mantener una buena hidratación en la piel durante el embarazo, aplicando cremas muy nutritivas para aliviar también las molestias de los picores. Lamentablemente no hay manera de prevenirlas en su totalidad, pero si de reducir su apariencia.
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Cambios en el pecho
Uno cambio que se aprecia desde el inicio del embarazo, es el aumento del pecho, desde el primer trimestre el pecho aumentará una o dos tallas, estabilizándose en el segundo trimestre y volver a crecer en el tercer trimestre de nuevo.
El pecho estará más sensible y se puede sentir hinchado cuando se está embarazada. Los pezones también pueden ser más sensibles al tacto. Para aliviar las molestias que puede provocar esta sensibilidad se recomienda dormir con un sujetador de maternidad o deportivo, sin costuras y sin aros, para una mayor comodidad.
Además, las areolas, la piel que rodea los pezones, se oscurecerán y se agrandarán temprano en el embarazo. Generalmente en el tercer trimestre puede comenzar a salir calostro, un líquido amarillento y muy espeso.
Varices vulvares
A causa del cambio de peso y la menor circulación de la sangre, pueden aparecer varices en el embarazo. Las varices en las piernas son las más comunes y conocidas, pero también pueden aparecer en otras zonas del cuerpo como en los genitales.
Las varices vulvares se producen por la dilatación en las venas superficiales de la vulva y del periné. Éstas aparecen alrededor de la 20 semana de embarazo. Se presentan como venas hinchadas y azuladas. Aunque suponen una incomodidad, la buena noticia es que casi desaparecen por completo tras el parto. También pueden aparecer en el recto, en forma de hemorroides o en la vagina.
Boca y salud bucal
Las encías sangrantes son un problema frecuente en el embarazo, y se pueden tener más infecciones debido a ello. Esto es debido a que durante el embarazo el sistema inmune se reduce y se es más susceptible a las infecciones.
El aumento de las hormonas en el embarazo también afectan los ligamentos y los huesos de la boca, produciendo que los dientes se aflojen. Volverán a la normalidad después del embarazo.
Por ello es muy importante tener una buena higiene dental para prevenir problemas comunes como la inflamación de las encías, conocida como gingivitis.
Por ello se recomienda ir lo más temprano posible al dentista, mejor antes de quedarse embarazada, ya que durante el embarazo no se podrán realizar radiografías, ni tomar analgésicos. Pero si se tiene sangrado o hinchazón en las encías, hay que acudir de inmediato al dentista, ya que estos síntomas pueden ser signos de enfermedad periodontal. Esta enfermedad se relaciona con partos prematuros y bajo peso del bebé al nacer.
Aumento del flujo sanguíneo
La congestión nasal, las hemorragias nasales y las encías sangrantes son problemas derivados del aumento del flujo sanguíneo a las membranas mucosas de la nariz y la boca.
Cabello
Uno de los cambios que mejor se llevan en el embarazo, es el del cabello. Los estrógenos hacen que la fase de crecimiento se alargue más, por lo que tener un mayor número de folículos pilosos, lo que da como resultado un pelo más fuerte y brillante.
El pelo durante el embarazo no se cae prácticamente, por lo que disfrutaremos de una cabellera más abundante. Después del parto cuando los niveles de estrógenos disminuyen, todo el pelo que no se cayó, comienza a caerse, lo que puede parecer una caída muy abundante, es totalmente normal.
Por el contrario, todo el vello del cuerpo también puede crecer más de lo habitual, como encima del labio superior, en la tripa, en la espalda o en las areolas.
Uñas
Durante el embarazo las uñas crecen más, pero por el contrario se pueden volver más frágiles, con lo que pueden partirse más fácilmente. Estos cambios se deben al mayor flujo sanguíneo que llega a los dedos de las manos y pies, también por el aumento de estrógenos.
Piel
Las mujeres embarazadas, a menudo tienen un “resplandor del embarazo”. Una tez más rosada y que luce más, debido al flujo de circulación sanguíneo que aumenta. Pero no todos estos cambios son beneficiosos en el embarazo. Los cambios pigmentarios, como la “máscara del embarazo”, también conocida como melasma o cloasma, son comunes.
Estos parches marrones de piel oscurecida pueden aparecer sobretodo alrededor de los ojos y en las mejillas y en la nariz, debido a un aumento en la melanina, un pigmento que otorga el color a la piel.
A muchas mujeres les aparece una línea oscura en la tripa, desde el ombligo hasta el pubis. Esta línea es conocida como línea de alba o nigra. Este oscurecimiento es más más común en mujeres con una tez oscura o que tienen más exposición al sol. Esta línea se va aclarando tras el parto y tiende a desaparecer.
Los cambios de pigmentos también pueden causar que las pecas y los lunares se oscurezcan y se agranden durante el embarazo.
Las mujeres con acné verán cómo varía en forma y frecuencia durante en el embarazo. Puede empeorar o empezar a aparecer si se tiene una tez clara, o por el contrario, mejorar mucho e incluso desaparecer. Los cambios hormonales son los responsables de estos cambios.
En el vientre es muy común que se sientan picores, a medida que va aumentando y estirándose, para aliviar los picores, lo mejor es mantener la piel bien hidratada, así se evita que la piel se rompa y salgan las temidas estrías.
Las mujeres embarazadas tienen mayor sensibilidad al sol. Esto significa que la piel se quema más fácilmente. Hay asegurarse de usar una protección solar alta, mínimo factor 30.
Ombligo
A medida que el abdomen en las mujeres embarazadas se va expandiendo y aumentando su volumen, generalmente a partir del segundo trimestre, notará como su ombligo se sale.
Esto es totalmente normal e inocuo. Después del parto el ombligo volverá a su estado y forma anterior.
Temperatura corporal
La temperatura corporal basal de una mujer embarazada aumenta y permanecerá elevada durante todo el embarazo, por ello muchas mujeres tienden a sentir más calor y pueden llegar a sudar mucho. Esto es debido a que las glándulas sudoríparas tienen una mayor actividad y aumenta el índice metabólico, la cantidad de energía que se necesita en un día.
Es fundamental mantener una buena hidratación en el embarazo, especialmente en verano, bebiendo un mínimo de dos litros de agua. También se recomienda que usar ropa holgada y de algodón.
Articulaciones y ligamentos
La hormona relaxina es la encargada de dar relajar las articulaciones y ligamentos, para proporcionar la flexibilidad necesaria en la pelvis para el momento del parto.
La relaxina aparte de aflojar los ligamentos que se encuentran en la pelvis, también estira los ligamentos y las articulaciones en el cuerpo entero. Esto puede provocar dolores de espalda o incluso provoca ciática, que es la inflamación del nervio ciático, este dolor empieza al final de la espalda y recorre la parte posterior de la pierna.
Para aliviar estos síntomas, se recomienda ejercicios suaves como los ejercicios de Kegel, como el yoga o el pilates, pero siempre orientado a mujeres embarazadas.
Los calambres en las piernas, especialmente cuando duerme, lamentablemente también son muy comunes. Es debido a la presión que ejerce el bebé en crecimiento sobre los nervios y los vasos sanguíneos que llegan a las piernas.
Para mejorar la circulación se recomienda dormir de lado y mejor dormir del lado izquierdo. Esta postura mejora el riego sanguíneo y permite que lleguen al útero todos los nutrientes, también permite eliminar a los riñones todos los desechos y fluidos.
Otra afección de la pierna, la trombosis venosa profunda (TVP), puede ser grave. La TVP es un coágulo de sangre que se forma en una vena y causa dolor e hinchazón en una pierna. Póngase en contacto con su médico de inmediato si tiene estos síntomas.
Pies
Los pies pueden llegar a crecer hasta una talla adicional de zapato durante el embarazo, es debido también a la hormona relaxina, que conjuntamente con el aumento de peso, hace que el arco en los pies se relaje y se aplane.
Es muy común que los pies y tobillos se hinchen, debido a la retención de líquidos y a la circulación sanguínea más lenta. Para aliviar este síntoma, especialmente en verano, hay que refrescarlos y mantenerlos en alto cuando se esté sentada, esto ayudará a mejorar la circulación en esa zona.
Acidez y ardor de estómago
Estos problemas pueden comenzar o empeorar sobre todo en el tercer trimestre. Al crecer el útero y aumentar los niveles de la hormona progesterona, la válvula del esófago se relaja y permite que salgan alimentos por el tubo estomacal, causando la acidez y el ardor de estómago.
Para aliviar los síntomas, se recomienda comer en pequeñas cantidades, evitar alimentos como la cafeína, las frutas ácidas, el picante o el chocolate y no tumbarse inmediatamente después de comer.
Infecciones del tracto urinario (UTI)
AL inicio del embarazo, sobre todo en el primer trimestre, se pueden tener más infecciones de orina o candidiasis, sobre todo si se tienen habitualmente. Es necesario tratar estas infecciones correctamente, ya que las infecciones no tratadas pueden derivar en parto prematuro.
Los síntomas de infecciones de orina o cándidas son la necesidad de orinar con más frecuencia, sensación de ardor al orinar, la presencia de sangre o un fuerte olor en la orina.
Salud emocional
El embarazo implica el comienzo de muchos ajustes en su vida. Cambios físicos, mentales y emocionales, a veces esto puede parecer un poco abrumador y es común que algunas mujeres experimenten niveles más altos de estrés durante el embarazo.
Una dieta sana y equilibrada nos ayudará a reducir estrés. Te recomendamos revisar este artículos con los alimentos prohibidos en el embarazo.
Alimentos prohibidos en el embarazo
También realizar ejercicio suave, caminar 30 minutos al día es muy importante mantener los niveles de cortisol bajos, ya que esta hormona ocasiona la ansiedad.
Salud mental
Aunque cierto grado de estrés es normal en el embarazo, si se observa que comienza a ser abrumador o que resulta difícil hacer frente al día a día, puede ser una señal de que se está experimentando un problema.
Se conoce que en el embarazo y durante el primer año de vida del bebé, se es más propenso a experimentar problemas de salud mental, más que en cualquier otra etapa de la vida. Existen diferentes emociones que pueden surgir durante el embarazo, tales como la confusión, la culpa, el arrepentimiento e incluso un poco de pánico son muy comunes durante el embarazo, pero también pueden aparecer la ansiedad y la depresión.
Si ha experimentado algún problema de salud mental en el pasado o tiene antecedentes familiares, debe tener especial cuidado, ya que tiene mayor riesgo de tener estos síntomas en el embarazo. Las mujeres que tienen trastorno bipolar también pueden estar en riesgo, por lo que es importante que consultar con el médico nuestro historial.
Lo más importante es estar bien informado, para poder identificar los primeros signos de alarma y buscar ayuda lo más temprano posible. Cuanto más rápido se busque ayuda, más rápida será la recuperación y se estará mejor preparado para la llegada del bebé.
Pérdida de control
Si siempre ha disfrutado de una cierta sensación de control sobre tus patrones de alimentación, su tamaño y apariencia general, el embarazo podría significar la pérdida de una gran cantidad de poder. Es inevitable que su forma y tamaño cambien durante su embarazo.
Concéntrese en su aseo personal y manteniendo un aumento de peso saludable. Sentirse resentido por su embarazo solo le hará sentir peor y no hay nada que ganar con esto. Intente ver este momento de una manera positiva y mantenga a flote su sentido del humor.
Ansiedad
La ansiedad es una emoción común durante el embarazo. Afecta a un 15% de las embarazadas. Este estado puede ser general o más específico, como el miedo al parto. Es normal sentir nerviosismo sobre la nueva vida que se avecina. Pero el miedo no puede paralizar la actividad diaria.
Los cambios hormonales en el embarazo pueden propiciar cambios en el estado de ánimo, pasar de la alegría a la tristeza y estar más irritable. Descansar bien nos puede ayudar a recuperar nuestro estado normal y a estar mejor.
Siempre hay que acudir al médico si se sospecha que se tienen síntomas de depresión o trastorno obsesivo compulsivo.
Preocupaciones
La llegada de un bebé siempre trae consigo preocupaciones, no solo sobre la salud del bebé y el parto, sino también sobre cómo planificar los nuevos gastos que se avecinan, el cuidado del bebé, intranquilidad sobre si seremos buenos padres o que la relación de pareja se resienta. Para aliviar el estrés que puede producir estas nuevas cargas es mejor hablar con la pareja y la familia y planificarse lo mejor posible.
Susceptibilidad
Es muy común que las mujeres embarazadas se vuelvan más sensibles a las críticas. Pueden percibir algunos temas como críticas cuando, de hecho, nunca se plantearon como tal. Ser ultra sensible y emocionalmente susceptible es un estado común.
Hay que estar lo más tranquila posible e intentar construir relaciones de empatía y le sorprenderá lo comprensivas que puede ser la mayoría de las personas.
Aislamiento y soledad
Evite aislarse durante su embarazo. Es más fácil decirlo que hacerlo, sobre todo si tiene otros niños pequeños en casa. Simplemente salir de la casa con niños pequeños es muy difícil y, a menudo, es más fácil rendirse y quedarse en casa. Pero para cubrir sus propias necesidades de socialización, es importante que hable y se conecte con otras mujeres. Existen grupos de apoyo a la crianza que ayudan a las madres.
Accede para ver el artículo completo ---> Cambios corporales durante el embarazo físicos y emocionales o la portada de Mamibicho.