¡Buenos días! Empezamos el miércoles con ganas de reivindicar un huecopara las mujeres. Sobre todo para las que estamos en casa con los niños. Porque tanto si ha sido decisión personal como si fue una decisión de la empresa en la que trabajábamos, al final estamos con ellos, en casa, encargándonos de muchas cosas, sacando adelante a nuestra familia, invirtiendo nuestro tiempo, ganas e ilusiones en ellos, sin recibir, en muchas ocasiones, ni las gracias por todo lo que llevamos a la espalda (¿sentís vosotras también las contracturas?).
Y llega el momento en el que nos pica el gusanillo de no ser solo madres porque, aunque nuestros hijos nos necesiten, nosotras necesitamos empoderarnos y que se nos valore el trabajo. Esta última parte es quizá la más compleja. ¿Quién valora aquello si lo hace gratis? ¡Todo el mundo cobra por su trabajo! Más o menos, menos o más, todos cobran. ¿Cuánto cobramos las madres a jornadacompleta? ¡Nada! Encima no te puedes quejar de que estás cansada porque enseguida hay quien te dice que "cómo vas a estar cansada si estás todo el día en casa" (para mi sorpresa, me lo dicen mujeres, los hombres me entienden más). Claro, los niños los tengo atados para que no se muevan, no se ensucien, no manchen y no molesten, ¿de verdad lo crees? Los niños son niños y tienen demandas normales en cuestiones de higiene, alimentación, cuidados, atenciones, mimos? ¡y estamos con ellos 24 horas!
Y siguiendo con ese momento de emprender o de volver al mercado laboral todo lo que encontramos está lleno de trampas. En muchas ocasiones no miran tu curriculum si llevas fuera del "mercado laboral" X tiempo. En otras, el hecho de ser madre resta puntos porque te preguntan (aunque sea ilegal o esté mal visto) que qué harías con los niños si se ponen malos (¿está pregunta se la hacen también a los hombres?). En otras, nuestras miras están en ser mujeres trabajadoras pero conciliando con nuestra familia y no aceptamos jornadas astronómicas en una oficina. ¡Es que eso no es viable!
Así que emprender es una
Mi recomendación para conciliar:
Corresponsabilidad: Los niños son de papá y de mamá. Así que los hombres a encargarse de los niños (que lo hacéis fenomenal) y las mujeres a dejarse ayudar. Ya está bien de las "etiquetas" de que ellos no pueden y nosotras de que somos superwoman.
Organización: revisa horarios que te permitan realizar las diferentes actividades previstas en momentos en los que los niños duerman la siesta o estén haciendo actividades con papá, los abuelos o extraescolares. Los momentos de familia deben contemplarse en la jornada del día como algo más de la rutina.
Pide ayuda cuando lo necesites: Seguro que los abuelos, tíos o algún amigo pueden echarte un cable para atender a los niños mientras tú terminas esa parte del proyecto que necesita un empujón. ¡Inténtalo! Verás como no es tan difícil.
Separa las tareas pendientes en urgentes/no urgentes e importantes/no importantes: Así podrás valorar, objetivamente, a lo que tienes que dedicar el tiempo ¡ya! Lo que no es urgente, puede esperar?
Hay que ser eficaz no solo eficiente. Eficiente significa que hacemos muchas cosas, eficaz implica, además, que lo hacemos mirando hacia nuestra meta. ¡A por ello!
Cree en ti y en tu trabajo. Al final, tendrá recompensa y conseguirás la conciliación.
Y ahora os dejo, mi ratito de conciliación ha terminado: mis niños se despiertan y llega el momento de jugar, cantar, bailar, preparar la comida, salir a pasear a la perra, poner lavadoras? ¡Por dinero no, pero por su infancia slowlife (tranquila) SÍ! ¿Veis como no todo en esta vida es el dinero? Os dejo un vídeo que me mando mi cuñada (gracias Cata) que habla sobre la maternidad como plus en la experiencia laboral.
¡A las 11.00 horas tenemos el taller de "Adiós pañal. Hola orinal"! ¿Te has apuntado ya? Te dejo el enlace para hacerlo
¡Un abrazo y feliz miércoles!