¿A alguna le suena Michael Odent? Es un prestigioso obstetra, autor de un libro llamado 'El bebé es un mamífero'. Bien, pues este hombre, fue entrevistado hace poco por un medio extranjero y se le preguntó a cerca de las condiciones 'excepcionales' en las que se dan muchos partos imprevistos. Mujeres que dan a luz en la calle, en un taxi, de camino al trabajo, en el metro...¡así, de repente!
El prestigioso doctor resaltó el aspecto positivo de los partos callejeros, porque según él, en estos partos todo se basa en algo instintivo: el 'reflejo de expulsión materno-fetal'. Un impulso totalmente animal, involuntario, e irresistible que desencadena el parto en tiempo récord y que se produce cuando la mujer está deshinibida.
Lo que pretende explicar el experto, es que a menudo tendemos a idealizar el parto adornándolo y exagerándolo con multitud de factores que en verdad, agobian inconscientemente a la madre, y por lo tanto, al hijo que lleva dentro. Por eso, cuando una mujer sin quererlo ni beberlo, da a luz en un lugar que no está preparado para ese momento, que no es un hospital ni es su casa, todo se desarrolla naturalmente y con rapidez.
Seguro que muchas pensáis...¿qué pasa con la higiene? Pues sabed que para muchos de estos médicos, 'no es un tema crucial' mientras se trate de que el bebé esté bien atendido y de que haya personas que ayuden a la madre, durante el nacimiento.
Olmert suele decir siempre estas palabras en sus comparecencias:'somos mamíferos, somos animales, al fin y al cabo'.
¿Qué? ¿Cómo se os queda el cuerpo, futuras mamás, al pensar en que os pase algo así? ¿Creéis que no es para tanto?