Queremos que nuestros hijos sean los mejores en todos los aspectos. Desde muy pequeños nos preocupamos por querer que sean brillantes para que tengan un futuro prometedor.
Que hablen idiomas desde muy pequeños, que sean casi deportistas de élite, que saquen unas notas impecables... ¿De verdad así estamos ayudando a nuestros hijos?
Los niños son niños, y con nuestra actitud no les hacemos disfrutar de esta etapa de la vida, la mejor, como deberían. Cada vez las consultas de los psicólogos infantiles están más llenas con casos de estrés infantil. Porque sí, los niños también se estresan.
Cuando yo era pequeña todos los días podía salir a parque y me pasaba varias horas jugando con mis amigos, pero desgraciadamente los niños de ahora tienen tantas obligaciones que ¡no tienen tiempo de jugar!
¿Has oído hablar del síndrome del súper niño o niños de invernadero? Es un problema cada vez más habitual que se produce por el exceso de estimulación que reciben los pequeños. Como queremos que sean los mejores los sobre estimulamos y les cargamos de actividades desde muy pequeños.
Sin duda, estimular a nuestros hijos está muy bien y les puede ayudar mucho. Pero la infancia es una etapa muy corta y no les debemos sobrecargar a los niños con actividades. Los niños necesitan tener tiempo para disfrutar de su infancia.
¿Y qué puedes hacer para que tu hijo no tenga estrés infantil? CÓMO PODEMOS AYUDAR A LOS NIÑOS A SUPERAR EL ESTRÉS INFANTIL
Favorece su autoestima
Un niño que ha logrado desarrollar un alto nivel de autoestima está menos expuesto al estrés.
¿Qué puedes hacer para que tu hijo tenga un buen nivel de autoestima? Reforzar sus acciones tanta verbal como conductualmente. La teoría es sencilla, cuando tu hijo haga algo tenemos que hacerle ver que lo ha hecho bien y que nos importa.
Por ejemplo si hace un dibujo una forma de reforzarle verbalmente es felicitándole por lo bonito que es y una forma de reforzarle conductualmente es poniéndolo en algún lugar visible de la casa (aunque no "pegue ni con cola")
También es importante para la autoestima de los pequeños que sus padres le fomenten un sentimiento de autonomía. Déjale hacer cosas por sí solo.
Favorece que se sienta capaz
Todas las personas, niños y adultos, necesitamos sentirnos capaces. Sentir que soy capaces de resolver nuestros propios problemas.
Los pequeños tienen que ser conscientes de que ellos pueden enfrentarse a sus problemas y los pueden resolver por ellos mismos, no tienen que depender de mamá y papá. Muchas veces somos nosotros los que no les permitimos hacerlos y eso nos le ayuda en absoluto. Les tenemos que dejar que se enfrenten a ellos para que aprendan a solucionarlos. Otra cosa diferente es que si necesitan apoyo o nos pidan ayuda nosotros se la prestemos.
Además les tenemos que hacer comprender que pedir ayuda a veces es parte de la resolución de problemas. Pedir ayuda nos les hace menos capaces.
Le tenemos que aportar humos a sus vidas
Lo contrario al estrés es el humor. Sonreír es la mejor medicina contra el estrés. Libera las tensiones y produce bienestar mental y una actitud positiva.
Hagamos que nuestros hijos aprendan a sonreírle a la vida. Haz chistes con ellos y ríete de sus propios chistes.
Fomenta la creatividad y el cambio
¿Hay algo que agobia a tu pequeño? ¿Notas que tu hijo está preocupado o hay algo que le está haciendo sufrir?
A veces no podemos borrar sus problemas, y como decía antes se tienen que enfrentar a ellos pero sí que les podemos ayudar a que estar agobiados. Cuando sepas que hay algo que preocupa a tu pequeño intenta mantener su mente ocupada con otras cosas que le gusten. De este modo podrá olvidar lo que le está provocando sufrimiento.
Fomenta que haga ejercicio físico
Sin duda el ejercicio físico es una de las mejores medicinas para casi todo, y el estrés infantil no es una excepción. Hacer ejercicio ayuda a mantener la mente sana y distraída, además de mejorar la imagen que tienen los pequeños de sí mismos, lo que a su vez influye en la autoestima.
Eso sí, esto no quiere decir que si le apuntas a fútbol o a baloncesto, por ejemplo, le presiones para que sea el mejor. Simplemente tiene que hacer ejercicio, no tener una carga más.
Alimentación
La alimentación de los niños debe ser sana y ordenada. Sin recargar el estómago con cosas que no sean necesarias. Claro que de vez en cuando pueden comer chuches y esas cosas tan poco saludables que le gustan. Pero el 90% de las veces tienen que comer bien.
Lo ideal es tener horarios fijos para cada comida y que toda la familia comparta la hora de la comida.
Cuida su sueño
Es fundamental que los pequeños duerman las horas que necesitan. A veces la tentación de trasnochar es grande, pero los niños no deben hacerlo. Tienen que tener un horario para irse a la cama y respetarlo.
Además su lugar de descanso debe ser cómodo.
Los niños necesitan el apoyo incondicional de sus seres queridos. Necesitan saber que no están solos en el mundo y para eso hay que demostrárselo.
Es cierto que con el ritmo de vida actual, en los que los padres y madres pasan mucho tiempo de casa para trabajar a veces cuesta un poco pasar tiempo de calidad con nuestros hijos, pero es importante que intentemos encontrar un momento del día para disfrutar con ellos.
Espero que estos consejos te ayuden a alejar a tus hijos del estrés infantil.
Fuente original: Mas Juguetes