Si me sigues por las redes sociales sabrás que me casé ayer en una ceremonia muy modesta pero de lo más especial así que hoy estoy de súper buen humor, por eso te traigo esta entrada tan divertida sobre…
Los juegos más cochinos de los catálogos Navidad 2015
Creo que el título lo dice todo, te traigo unos cuantos juegos de lo más escatológico.
Como todos los años madres y padres nos cargamos de revistas de jugueterías para hacernos una idea aproximada de lo que les gustaría a los niños/as por Navidad y bueno, siempre hay un poco de todo: páginas rosas para niñas, superheroes, monstruos y coches para niños. A excepción de algún catálogo el resto no avanza en cuanto a la eliminación de los roles de género.
Pero hay una sección neutral, la de juegos de mesa y juegos en familia, que este año me tiene con una sensación entre asqueada o muerta de risa no se muy bien cómo definirlo.
Entre los típicos juegos de mesa: pictionarys, mímica, parchís… aparecen cosas como las que os voy a mostrar a continuación, que no digo que sean menos divertidas, pero que son cuanto menos escatológicas y hasta un pelín grotescas.
Los 7 Juegos más cochinos del catálogo 2015
La vaca loca
Juego de IMC que consiste en introducir dentro de la vaca fichas blancas (leche), marrones (boñigas) o dorada (leche de calidad?). Lanzas el dado y tiras de la ubre de la vaca tantas veces como te diga el dado. Por la ranura trasera de la vaca puede salir leche que vale un punto, leche high quality que vale dos puntos o una boñiga que resta un punto. La vaca te dice cuando termina la partida sacando sus ojos de las cuencas.
Todo muy gráfico. Y nada alejado de la realidad. No.
Sali Baba
¿Qué le pasa a IMC? Se lo deben pasar pipa inventando estos juegos y probándolos (Contrátenme)
Bien, este juego consiste en que el camello te propone una serie de pruebas, tres. Si las superas ganas un refresco y si fallas un escupitajo de camello. Digo yo que será agua, pero gráficamente sigue siendo asqueroso que te escupa un camello. Aunque si te metes en la historia del juego…te has perdido en mitad del desierto y los refrescos ya te van bien, pero un escupitajo que es agua, digo yo que te irá mejor. Ya sabes, por eso de que el azúcar de los refrescos da más sed. Casi mejor que te echen un escupitajo de camello en la cara ¿no?
Gastón Cabezón
Este he tenido el placer/asco/risa de tenerlo en casa, aunque no duró mucho la estructura de tienda de campaña que da forma a la cabeza. También de IMC Toys. Consiste en extraer de la cabeza de Gastón por medio de sus orificios todo tipo de guarrerías: gusanos, pañales usados, arañas, vómito, caca, calcetines sucios…¿Pero qué demonios tiene este tipo en la cabeza? Es un juego de cartas y rapidez, debes conseguir los objetos que te dicen las cartas antes que tus compañeros. Pero no deja de ser un poco guarro más que nada por la representación de los objetos aunque el tacto del vómito o de los pañales es suave, muy suave… da gusto tocarlo.
Ca-ca-beza
Un juego de rapidez con cartas en el que se pasa de turno con un “tirapedos”, cojín de pedos de los de toda la vida y si pierdes te ponen una caca en la cabeza. Humillación por partida doble. ¿Te has fijado que siempre castigan al que pierde con algo asqueroso? En estos juegos le daría la razón a los niños/as que traen de fábrica el mal perder, como mi Julio. Encima de que pierdes te calzan una diadema de cagarruta en la cabeza.
Cerdito cochino
Este y el anterior son de Diset, que este año está también fino con los juegos marranos. Juego de tablero en el que cada jugador debe conseguir llenar la bañera de su cerdito de barro lo más rápido posible mientras el cerdito del centro hace gruñidos y otros sonidos. Si se tira un pedo pierdes. Que majo. Al menos no te humilla tanto pero no mola que se tire un pedo en tu cara aunque solo sea sonoro y no huela.
Cara splash
De Hasbro. No es tan escatológico como los anteriores pero tiene lo suyo. Es como una ruleta rusa, colocas una tarta en la catapulta (digo yo que tendrás que hacer merengue o poner nata cada vez que juegues ya que el bote de tartas como pone en la caja, no va incluido), asomas la cabeza por el agujero, giras la manivela y si la suerte no está de tu parte te llevas un tartazo en la cara. Eh ¡Qué gracia! ¿Y quien limpia la alfombra, el sofá, el niño o el suelo? Además que te den un tartazo en toda la cara, por lo menos a mi no me hace ni chispa de gracia.
Coco Loco
De Bizak. Consiste en un busto sin la tapa de los sesos al que tienes que ir sacándole partes del cerebro, si sacas el que no debes la cabeza reacciona haciendo girar los ojos y sacando la lengua como si se volviera loco. Me da un poco de miedo que luego mis hijos vayan abriendo cráneos de gente por ahí a ver qué pasa. No, es broma.
Si te preguntas ¿Qué enseñan estos juegos si es que enseñan algo? Creo que puedo darte un par de respuestas:
La vaca loca fomenta el aprendizaje de los números. Si me lee alguien de IMC Toys se me ocurren un par de sugerencias, por ejemplo habría que corregir eso de que la leche salga por la parte trasera, no se si será muy costoso o el mecanismo no lo permite pero una ranura de salida bajo las ubres de la vaca serían lo suyo. Eso y ampliar los productos que sacamos de la vaca, así podríamos usarla para explicar los productos derivados de la leche de vaca, pondría un yogur, mantequilla, brick de leche, y ya si eso la boñiga que salga por detrás.
Sali Baba fomenta la rapidez de los reflejos. Es un juego tipo Simón Dice, aunque el tablero está basado en el típico juego de trileros (¿dónde está la bolita?) Lo de que te escupan es un castigo, a mi personalmente no me gusta.
Gastón Cabezón ayuda a trabajar la memoria y a, mediante el tacto encontrar el objeto que corresponde a tu carta basándote en su forma y textura. Así que a nivel de fomento del desarrollo neuronal está bastante completo aunque los componentes sean escatológicos.
Ca-cabeza no deja de ser un juego de cartas, rapidez, agilidad, velocidad de reacción, pero al igual que con Sali Baba no estoy de acuerdo en que el perdedor sea castigado con una caca en la cabeza. Me parece innecesario un castigo por jugar.
Cerdito Cochino es un juego de rapidez y agilidad. Hasta que se tira el pedo el juego parece bastante divertido. Aunque un pedo a veces hace mucha risa.
Cara Splash es quizá del que menos aprendizaje puedo sacar, a no ser que quieras trabajar en tus hijos/as que aprendan a reírse de sí mismos, pero para esto se lo tendrás que explicar antes de jugar: “si te cae la tarta a tí no hay que enfadarse, es un juego para reirse pase lo que pase”
Coco Loco trabaja la motricidad fina y la pinza, tan importante para el desarrollo motor de nuestros hijos. Existen otros juegos de motricidad fina menos gráficos, como el de los Monos Locos.
¿Qué? ¿Os animáis a pedirle a los reyes estas guarrerías tan divertidas? Todos estos juegos aunque su base sea asquerosa están pensados para pasar un buen rato de risas en familia.
Hay unas edades en las que los niños están constantemente con el caca, culo, pedo, pis en la boca y supongo que estos juegos deben pedirlos en esas edades.
Como ya he comentado tuvimos el Gastón Cabezón hará dos años, cuando Sergi tenía 6. Imagino que esa edad es la normal para que te pidan algo así.
Por si te ha gustado alguno te facilito los enlaces a Amazon bajo la descripción de cada juego y te invito a conocer estos “maravillosamente escatológicos” juegos y a contarme tu experiencia con alguno de ellos.
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