Ya llegó la vuelta a clases. Y si con ese regreso al consultar a tu niño o niña sobre cómo le fue en la escuela obtienes siempre una respuesta negativa o por el contrario un «no sé» o silencios incómodos, alerta, algo pasa sobre todo si preguntas concretamente sobre la maestra. Así como hay niños que aman a su maestra, la dibujan y le cuentan todo a sus padres al volver a casa, otros, incómodos en su interacción con la Miss, se callan o muestran síntomas de una mala relación.
Los padres suelen dar concesiones a los docentes, es decir, comúnmente, el maestro es un aliado y entre los dos deben «educar» al niño. Por eso, algunos dejan de lado la voz de sus propios hijos. Escuchar qué tienen que decir los niños es importante. La psicóloga Catherine Pierrat, explica cómo afrontar la situación.
Aprender a escuchar a los niños
Si el niño le confiesa que no le gusta su maestra, atentos. «Para empezar, cuando hay una queja, lo importante es escuchar al niño. No hace falta quitarle importancia al tema, ya que el niño podría sentirse ofendido, pero tampoco dramatizar. Es absurdo adelantarse a los acontecimientos y pedir de inmediato una reunión con la profesora«, señala Pierrat.
Añade que «empieza por comprender qué es lo que ocurre y, para ello, debes hablar con tu hijo. Esta charla se puede desarrollar de distintas formas, a través de un dibujo o de un juego de rol (pide a tu hijo que reproduzca la escena). El objetivo es, al fin y al cabo, entender la situación«.
Así como hay docentes cariñosos, otros son más estrictos. En el grupo escolar pasa igual, hay niños más fuertes y otros sensibles.
«Cabe recordar que los niños son muy sensibles a las figuras autoritarias. Así pues, si la profesora le ha regañado por algo o le ha llamado la atención por su comportamiento, por ejemplo, su reacción no se hará esperar. Además, los más pequeños se implican mucho en el colegio, sobre todo en decisiones que ellos consideran injustas. Si a tu hijo le han castigado por error, él se enfadará mucho con la profesora«, puntualiza la psicóloga.
Recomendaciones
Habla con tu hijo para detectar la situación recurrente, el motivo aislado, la inconformidad, piensa que es tan importante conocer esa emoción de rechazo, qué la generó y si tiene reparo platicando con la maestra para fomentar un ambiente cálido en donde las palabras sean de entendimiento y no de rechazo.
Evita culpar al 100% a la maestra sin antes estar seguros de que situación está provocando la incomodidad, los niños suelen ser muy susceptibles, será importante ganarte su confianza y después resolver el problema de forma respetuosa. En caso de que encuentres inconsistencias de parte de la profesora o maltrato, la solución tendrá que ser más determinante e involucrar a superiores. No esperes que pasen los días, permanece atento al diálogo diario con tus pequeños, no dejes que nadie cultive mejor su confianza que tú.