Existen bastantes mitos acerca de como ha de prepararse un biberón para el bebe.
Aparecen dudas sobre el agua, la leche en polvo,cantidades y calidades.
Respecto al agua para prepararlo;
Tanto el agua potable que sale del grifo de nuestras casas como el agua embotellada deben estar exentas de bacterias y virus patógenos, en cantidad suficiente para provocar enfermedad, e incluso de determinados microorganismos la ausencia ha de ser total.
Sin embargo aun cumpliendo la legislación vigente en materia de aguas de consumo publico,no es posible asegurar la ausencia de por ejemplo quistes de Giardia o de ooquistes de Cryptosporidium en el agua potable del grifo.
Teniendo en cuenta además que el lactante todavía presenta una menor capacidad inmunitaria y que proporcionalmente a su peso recibe un mayor aporte de líquidos, sobran razones para vigilar que el agua con la que preparamos los biberones sea segura al máximo.
Por ello el agua potable para preparar un biberón debe hervirse durante 1 minuto si estamos a nivel del mar. Habrá que añadir 1 minuto más por cada 1.000 m de altitud.
La ebullición del agua potable durante 10 minutos puede resultar perjudicial, ya que, aumenta la concentración de sodio unas 2.5 veces.
El agua de bebida envasada no necesita hervirse, pues carece de parásitos, atendiendo a la legislación vigente.
Es recomendable mantener esta práctica hasta los 9-12 meses de edad, ya que a partir de esta edad, el lactante gatea, y parece incongruente hervir el agua cuando ya no podemos evitar ,que se lleve a la boca las manos sucias después de tocar el suelo.
Para preparar el biberón adecuadamente se han de seguir las normas de preparación o de reconstitución que señala el laboratorio fabricante de la fórmula o leche en polvo.
En general, se añade una medida rasa de leche en polvo del cacito dosificador que viene en cada bote o caja de leche por cada 30 ml de agua tibia.
Por supuesto la leche se reconstituye en agua exclusivamente.
Es necesario lavarse las manos antes de empezar a preparar los biberones.
La preparación del biberón debe ser inmediatamente antes de la toma, si bien se pueden preparar biberones para todo el día si se conservan en la nevera.