En muchos países ahora es la época del año más fría, el invierno. Llegan las bajas temperaturas y la humedad, por lo que es importante saber cómo proteger a nuestros bebés del frío. Muchas veces pensamos que la solución es abrigarlos bien, incluso en exceso, porque pensamos que el frío es el peor enemigo de los pequeños. Pero la realidad es que los bebés suelen enfermar más por el cambio brusco de temperaturas que por el frío en si.
Así que no es bueno abrigarlos en exceso, ni mantener la calefacción de nuestra casa muy fuerte. Los pediatras recomiendan mantener a los bebés en ambientes cálidos, entre los 20 y los 22 grados, y evitar los cambios bruscos de temperaturas.
También hay que tener en cuenta que el mecanismo de termorregulación del bebé todavía no está desarrollado del todo, por lo que se recomienda controlar la temperatura corporal a través de la nuca y en cuello y no dejarse llevar por otros signos como son las manos frías, el color de la piel o el sudor.
Hay que vestirlos con ropa cómoda y no muy ajustada, para evitar irritaciones en la piel, es importante que su piel transpire correctamente, y también es aconsejable usar suero fisiológico para mantener la nariz limpia y evitar mucosidades típicas en esta época del año.
Imagen: Alex Proimos / Flickr
¿Cómo protegéis a vuestros bebés del frío?