Es siempre la pregunta y cuando la hizo en una ocasión una madre a un pediatra, cual es la mejor edad de enseñar a leer a su hijo.
Él le contestó: Cuántos años tiene su hijo?
Bueno - le respondió la madre- ya tiene cinco años
a lo que el galeno le respondió: Señora, váyase a casa rápidamente, ha malgastado los mejores cinco años de la vida de aprendizaje de su hijo.
Y es que en todas las literaturas infantiles se indica que desde el vientre materno, la estimulación temprana, el bebé ya está capacitado para comenzar a aprender y que los idiomas se les da mejor en los primeros años de vida.
Se indica que a los dos años es el mejor momento para empezar a enseñarle a leer, hay bebés que ya son capaces de comenzar a los diez meses.
Quien debe enseñar?
En primera instancia es mejor que sea la madre, el papá también está capacitado, pero si ambos cuentan con poco tiempo lo podrá realizar cualquier pariente con quien el niño se sienta a gusto, en confianza.
- La enseñanza debe hacerse con alegría, por ello el juego cumple un papel muy importante, pues el niño no verá la enseñanza como algo impositivo, sino como una manera de seguir aprendiendo.
- No se debe aburrir al niño, por lo que el tiempo es mejor que sea corto, no más de cinco minutos y unos cinco tiempos al día; entre más pequeño sea el infante, más corto el tiempo. Suspender las lecciones antes de que el niño se canse, así quedará con ganas de volver a jugar a aprender.
- No ir demasiado aprisa, así no aprenderá y más bien le causará inquietud, al no poder seguir el paso de quien le enseña.
- No ir demasiado despacio, le aburrirá, ya que los niños tiene su ritmo de aprender y se debe conocer.
- No hacerle demasiadas pruebas, a los niños les gusta aprender pero no reaccionan bien al ser evaluados, al igual que si se repite muy frecuentemente una prueba que ya ha superado le aburrirá y reaccionará diciendo que no sabe y diciendo cualquier respuesta, si el niño actua así hay que entender que nos está reprochando el que lo volvamos a poner a realizar lo mismo, por ello hay que ser innovador en el aprendizaje y espaciarlo.
- No presionar al niño, sea saturándolo con material en cada lección, o si el no desea jugar a aprender, es preferible dejar pasar unos días.
- No estar tenso, el niño es muy sensible, se dará cuenta si quien le enseña se encuentra tenso, por lo que mejor busque otro momento.
- Tener inventiva, cada niño es distinto, los padres deberán conocer bien a su niño, sabrán aquello que particularmente le gusta.
- Contestar todas las preguntas del niño, cuando se les enseña a leer las preguntas son más numerosas, como Qué palabra es esta?, Qué quiere decir esto?, así su vocabulario crecerá rápidamente.
Imágenes: Blog bebé