En este caso se trata de un niño de 9 años filipino llamado Daniel Cabrera. Daniel estudia primaria, como muchos de nuestros hijos, su problema es que su casa quedó destruida después de un incendio, su padre murió en la carcel y él vive con su madre y su hermano pequeño en un puesto de comida sin paredes.
Daniel quiere ser policía y trata de seguir sus estudios como sea. Así que se le ocurrió poner una especie de mesa a la luz de un McDonal´s para poder ver y hacer sus trabajos de la escuela.
Volviendo al caso, la imagen de Daniel se viralizó en Redes Sociales, para mí un medio buenísimo para difundir mensajes, y gracias a ello ha conseguido una beca a través de una campaña de crowfounding. ¡Genial! Pero no olvidemos que existen muchos niños por el mundo como Daniel.
Y yo pienso: la compañía McDonald´s ha tenido una oportunidad de oro para becar a este niño y a muchos más, creando un proyecto sin animo de lucro, para ayudar a niños en su misma situación. ¿No os parece?
A través de su famoso “Happy Meal” podía haber devuelto a la sociedad una parte de los gigantescos beneficios que recauda cada día. Está claro que su departamento de marketing, con todos mis respetos, se merece una colleja.
La opinión de Soficó. 12 años.
La verdad es que es muy triste. Pongamos un ejemplo: Yo, el otro día iba a comprar un yogur-helado con mis amigas, pero de repente veo que no tengo dinero suficiente para comprarme uno. Y me agobio, me pongo nerviosa, y eso ya me ha pasado otras veces, me angustió. Y pienso: si yo solo me quemo por dentro por esa tontería, ¿qué sentiría por lo que esta pasando este tipo de niños? Horrible ¿verdad?
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