¡Tenemos flota nuevo! Antes de que me pongáis a parir con lo de la seguridad de los niños en el agua y bla, bla, bla, dejadme explicar:
Durante la semana suelo ir sola con los niños a la piscina de mi mejor amiga, ella tiene una bebé de 19 meses, y obvio, no me puede echar una mano con alguno de mis mellis. Por lo tanto, le toca a esta menda apañárselas sola con dos fierecillas que no son para nada tranquilas, cada uno quiere tirar para un sitio diferente y les gusta jugar a cosas distintas. ¿Solución? Siempre en el colo de mama, ¡¡los dos!! Imaginaos el cuadro:
Pesan ya cerca de los 12 kilos cada uno (eso si no los estan pesando ya), ¡son 24 kilos en brazos! Y vale que en el agua todo pesa menos, pero creedme, pesar, PESAN, y mucho.
Hemos probado poco a poco todo lo que buenamente hemos podido:
Bañarme con uno y dejar al otro en una moto, un parque o lo que sea seguro y luego cambiarlos... NO FUNCIONA; el que se queda se pilla un rebote "que pa qué".
Comprar flotadores de esos con sillita (mucho más seguros), yo con uno en los brazos y sujetando al otro en el flotador... NO FUNCIONA; el que está en el flota llora como si lo mataran, será por miedo, por incomodidad o por lo que vosotros queráis imaginar, pero no calla. Resultado: mamá estresada y con ganas de escapar.
Manguitos... NO FUNCIONA, aún sin probarlos, me da terror ponerle eso a mis bebés y que queden así en el agua, por lo tanto ni los pruebo.
Tener a cada uno en un brazo... FUNCIONA A MEDIAS. ¿Por qué a medias? Pues porque los zánganos estan contentos pero solo cinco minutos, enseguida alguno de ellos se rebota y quiere jugar (generalmente Sergio) y yo tengo que hacer verdaderos actos de magia para entretenerlos, y a esto sumadle ¡lo que me llegan a pesar! Termino con los brazos reventaditos (desde que tengo mellizos mis brazos se han convertido en rocas).
Probando alternativas decidimos comprar hoy este tipo de flotador de solo el aro; ya sé que no son seguros para bebés tan pequeños, pero yo solo lo quiero usar para aliviar un poco el peso, los bichos siguen en mis brazos y yo aguanto mucho más.
No los suelto en ningún momento, creedme, soy muy
Creo que solo me quedaría por probar los chalecos salvavidas, y por ahora no logro conseguir sus tallas.
Si alguna buena madre me está leyendo en estos momentos y se le ocurre alguna brillante idea, por favor, que no se la guarde, que sea benevolente y la comparta conmigo porque de lo contrario creo que me tendré que privar de disfrutar de esa pedazo de piscinota todos los días.
¡Gracias por leerme! y recuerda que tus comentarios me hacen crecer.