Introduciendo la rutina del cepillado dental en una vida sin rutinas
Ahora que no nos lee nadie, voy a haceros una confesión. Entre vosotr@s y yo: En casa no seguimos ninguna rutina (murmullo de desconcierto). Me fascinan esos padres que tienen todo perfectamente estructurado en una especie de horario mental que siguen a rajatabla. A las ocho baño, a las ocho y media cena y a las nueve y media leemos un cuento y a dormir. Increíble. Y lo más increíble de todo es qu...