Antes de nada, matizar, que los bebés, durante los primeros meses de vida, SÓLO necesitan de nuestros brazos y calor. Y ya está. «sólo eso. Necesitan olerlos, que les demos alimento, calor y amor. Sus primeros juguetes serán nuestros dedos, después serán los suyos, sus manos, sus pies… Irse reconociendo poquito a poco. Son etapas súper importantes y que no hay que tener prisa, todo llegará creedme. Mi consejo es que disfrutéis mucho de la etapa en la que sus dedos o sus pies son su mejor entretenimiento.
Cuando ya empiezan a sostenerse, son capaces de coger cosas con la mano y llevárselas a la boca por sí solos, cuando empiezan a mostrar interés por aquello que les rodea es bueno empezar a proporcionarles materiales que puedan satisfacer esas necesidades.
Aprovecho para recordaros post que os pueden ser de mucha utilidad y que escribí durante el primer año de Valentina como:
Sonajeros y móviles musicales
Mordedores y gimnasios
El cesto de los tesoros
Todos los posts que podéis encontrar en la categoría de 0-18 meses aquí.
A todos los post que podéis encontrar en el blog, ya sea a partir de las categorías o directamente desde el buscador os quería añadir algunos que hemos incorporado desde la llegada de Julieta:
Mini rodari: es del tamaño perfecto para sus manos. Tiene un sonido súper suave y el degradado de los colores hace que sea un juguete precioso para mirar y observar. Lo podéis encontrar aquí
Libros de tela: cada niñ@ es un mundo, y lo son desde bebés. Así que no te fustigues si tu bebé no muestra atención por los juguetes o no lo hace durante el tiempo que tu crees que debería hacer. Yo he tenido una de cada, y creeme, que todos son normales. Valentina no quería saber nada de cuentos, no mostraba interés y pronto perdía la atención. Pero nosotros seguíamos mirándolos y contándoselos. Y ahora, con 3 años y medio no hay nada que le guste más que sentarse a tu lado a que le cuentes y cuentes sin parar. Este Sant Jordi le regalaron a Julieta este que es ideal por tamaña y texturas. Puedes encontrar similares aquí
Mordedor de ámbar: este fue uno de los regalos que recibió estas navidades y se convirtió en su mordedor preferido. Las distintas formas, el perfecto agarre, las diferentes maderas… lo hacen único y especial. Nos gusta tanto que ha sido el regalo que hemos hecho a los bebés que han ido naciendo después de ella. Lo podéis ver aquí.
Sonajero de ganchillo: esta casa nos encantaba por los títeres que tuvimos de familias, y este ha sido un acierto igual: un pequeño zorro que se puede estrujar, morder y hacer sonar. Lo tenéis aquí junto con más animalitos.
Y por último, si como yo, no sabéis estaros quietas y os gusta hacer vuestras propias composiciones, os enseño como hacer un mordedor de cintas de arcoíris. Es muy sencillo y os puedo asegurar que les encanta: coger el aro, morderlo, chupar las cintas, ver el movimiento que generan…
Sólo necesitáis un aro o anilla de madera (aquí) y cintas de colores que podéis encontrar en cualquier mercería.
No tiene más misterio que ir atando las cintas desde el centro y dejando que queden sueltas los dos extremos. En las fotos lo veréis más claro:
Las cintas al estar satinadas, resbalan, así que podéis darles con un puntito de silicona por la parte interior y así aseguraros que no se muevan ni que los pequeños puedan acceder a ella. Yo, como se que todo a ir al a boca, prefiero dejarlo sin nada e ir apretando a medida que se van aflojando.
El resultado es precioso, y de verdad, que las cosas más sencillas son las que siempre gustan más. Además, no solo Julieta le da uso, si no que Valentina también lo coge y disfruta dando vueltas, bailando y viendo el efecto que generan las cintas con el movimiento.
¿Qué os parece? ¿Cuáles han sido los imprescindibles para vuestros bebés?