Lo primero que os voy a pedir, queridos Reyes Magos de Oriente (O de Andalucía, según Benedicto XVI), es que habléis con quien sea el responsable de decidir sobre nuestros destinos y le digáis que por favor, en 2015, se olvide de nuestra familia. Con el 2014 que nos ha brindado ya tenemos bastante, de verdad. Dile que las heridas que nos ha dejado este año en forma de pérdidas nunca se van a curar, pero que al menos tenga la decencia de permitir que cicatricen. Creo que tampoco le estoy pidiendo tanto.
Por si fuese poco, dile también que en 2014 nos ha dejado a los dos en paro. Se lo perdonamos, porque estamos pudiendo disfrutar de nuestra pequeña saltamontes, pero que sepa que no es fácil sobrevivir así en un mundo en el que hasta muchos trabajadores sufren para llegar a final de mes. Dale las gracias de mi parte, las cosas como son, porque como he dicho al principio, el nuevo año llega con un ilusionante empleo de la mano, pero pídele por favor que nos eche un cable con Tacatá Comunicación. Es nuestro proyecto de futuro y nos gustaría que fuese creciendo año a año.
Para que carguéis un poco a los camellos, este año os voy a pedir 450 gramos de paciencia para aguantar esos días que se tuercen y en los que Maramoto está más inquieta aún que de costumbre. Poned también un bono de 365 horas de sueño, para recuperar un pequeño porcentaje de las muchas que en 2014 se han perdido por el camino dejando su rastro en forma de ojeras. Y si no es mucho pedir, añadid un palé cargado de amor para dosificarlo durante 2015 y repartirlo entre la mamá jefa, mi pequeña saltamontes y toda la gente a la que quiero. Que no es poca. Así que no escatiméis en esto último.
Espero también, yo tengo fe en vosotros, que no dejéis a ningún niño sin regalo. Sé que la gente es más solidaria aún cuando vienen mal dadas, así que seguro que entre todos logramos que ningún niño se quede este año sin sonreír el día 6 de enero. Nosotros, para colaborar con la causa, vamos a donar todos los juguetes que Maramoto no utiliza ya. Queremos enseñarle a compartir desde pequeña. A los que no sepan cómo colaborar, decidles de mi parte que pueden hacer un microdonativo en la campaña “La Magia de la Navidad” de la Obra Social La Caixa. 1,20???, 4???, 8??? o 15???, en función de las posibilidades de cada cual. Con una pequeña aportación estoy seguro de que entre todos podemos lograr que, en un país en el que 1 de cada 4 niños vive en situación de pobreza, ninguno de ellos se quede sin sentir la magia de la Navidad.
Y bueno, que si sin querer se os escapa algún libro para obsequiarme con una agradable lectura, o alguna sudadera por casa, tampoco me voy a enfadar con vosotros, ¿eh? Yo lo dejo caer…
PD: Os habréis dado cuenta, queridos Reyes Magos, que hoy es día de Lotería de Navidad y no os he pedido ni un pellizquito. No sé de qué os sorprendéis. Después de 30 años sin catar ni la pedrea uno ya tiene asumido que los sorteos no son lo suyo.
PD2: Nos vamos unos días a disfrutar de la Magia de la Navidad con la familia de Valencia. Si no nos vemos antes por aquí, ¡Feliz Navidad a todos! Que sepáis que es un placer compartir esta maravillosa experiencia de la paternidad y la blogosfera con vosotros. Que 2015 os colme de alegrías y felicidad. Gracias por acompañarnos en el camino.
Fuente: este post proviene de Un Papá en Prácticas, donde puedes consultar el contenido original.
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