El primer paso en el proceso de narración de un cuento es la elección del cuento, aunque también se puede utilizar la adaptación de cuentos.
Tiene que ser el más adecuado al momento evolutivo de los niños y niñas, el que más se ajuste a sus centros de interés y a cualquier otro aspecto que pueda influir, como la época del año, los valores que transmite, etc.
Se pueden aprovechar circunstancias que no están previstas, como el descubrimiento de los niños y niñas de una mariposa. Esto les genera curiosidad y les plantea preguntas. Este momento podemos aprovecharlo para contarles un cuento donde la protagonista sea una mariposa.
Los cuentos que tienen tres componentes (tres personajes, tres situaciones, tres momentos) son fáciles de comprender por los niños y las niñas. Es una cantidad que el niño y niña puede controlar.
Es importante a la hora de contar un cuento que el ambiente facilite este momento fantástico.
Tenemos que evitar las interrupciones, los ruidos y las interferencias que puedan distraer la atención de los niños y niñas.
Resulta fundamental no tener prisa, deleitarse contando el cuento.
Para el comienzo de un cuento deben emplearse fórmulas conocidas como “érase una vez” u otras similares.
Si se emplean recursos como rimas, cancioncillas o expresiones u onomatopeyas que el niño y niña tiene que repetir o puede cantar, facilita su protagonismo. Esta actividad es fundamental en el uso del cuento.
Es importante que el final suela ser el esperado y que acabe bien.
Puede existir cierto grado de sorpresa, pero no en exceso, para evitar que se genere confusión en los niños y niñas.
También existen fórmulas conocidas para el final, como “colorín colorado, este cuento se ha acabado” o “fueron felices y comieron perdices”.
Pautas de elección de un cuento dependiendo de la edad.
De o a 3 años
Disfrutan escuchando cuentos pero también les servirá de apoyo la ilustración. A partir de la observación de los distintos dibujos se facilita la comprensión de la historia.
La historia puede tener relación con las experiencias de los niños y niñas, con sus necesidades y sentimientos. Ligada a la realidad.
Argumento muy sencillo. Centrados en la palabra y el movimiento. Se utilizan los pre-cuentos y los textos rimados que pueden repetir.
Si se opta por un cuento donde aparezcan sentimientos de soledad o dolor, siempre tendrá un final feliz o reparador.
De 3 a 5 años
Se puede continuar con cuentos relacionados con sus actividades cotidianas, aunque se pueden incluir elementos fantásticos.
Momento donde se atribuyen características humanas a los objetos y muestran preferencias por las historias sencillas y no demasiado largas. Suelen gustarles mucho las historias de animales.
De 5 años en adelante
Se incrementa la motivación por lo fantástico. Se pueden contar historias más complejas, donde existan más personajes, por ejemplo.
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