Motivación: Transmitir entusiasmo a tus hijos es vital para que sean niños felices, completos, desarrollados física y emocionalmente. Que sientan pasión por todo lo que hagan en sus vidas hará que crezcan y maduren siendo personas plenas y autónomas. ¿Cómo podemos fomentar en ellos la motivación? A diferencia de los adultos, el nivel de motivación de tus hijos depende solamente de cómo lo cuidéis los adultos (padres, tutores, profesores…)
Cuida tus gestos y palabras. Trata de mostrarte amable y cercano con tus hijos. Sonriente, paciente, cercano... Dales siempre la oportunidad de mejorar. Motívales mediante recompensas puntuales, elogios en el proceso y anímales siempre a buscar beneficios a largo plazo. ¡Sois el mejor espejo para ellos!
Apego: El apego es prácticamente la cualidad más fácil de trabajar puesto que es innata entre madre e hijo, desde incluso antes de que nazca el bebé. Desde el embarazo, tu hijo sentirá un vínculo de conexión totalmente intuitivo e intenso contigo, su madre. Y este vínculo también puede fomentarse o trabajarse con su papá, desde que tu bebé nace. En este sentido, la comunicación no verbal y las caricias se vuelven importantísimas para favorecer el apego.
Como te hemos comentado en algunas ocasiones, el contacto piel con piel, calma, anima, motiva y alegra la vida de tus hijos. No dudes en demostrarles afecto siempre que puedas. Una de las formas más productivas de hacerlo es dándole masajes antes de dormir, por ejemplo. Estaremos demostrándoles amor a la par que les aliviamos y relajamos antes de ir a la cama. Antes del masaje puedes hacerte con unas toallitas como las que ofrece la marca Huggies®, por ejemplo, en su variante Natural Care. Lo bueno de las toallitas Huggies® es que están compuestas en un 65% por fibras naturales para que la piel del bebé no sufra, y no contienen parabenos ni fenoxyetanol. Además, has de saber que en un reciente Informe de la OCU sobre el impacto de la desechabilidad de las toallitas húmedas, las toallitas Huggies® han salido como las mejor valoradas por encima del resto de marcas gracias a una calificación global que atiende a aspectos tan importantes como: la calidad, los ingredientes, el precio o su nivel de biodegradabilidad. ¡Qué buena noticia!
Empatía: Como bien sabéis, es la cualidad que nos permite ponernos en el lugar del otro, para entenderle y saber respetar su punto de vista, aunque no lo compartamos. Para enseñarle empatía a nuestros hijos, debemos trabajarla nosotros primero. Practica con tu pareja intentando entender qué le motiva a ser como es y a hacer ciertas cosas que quizá tú no harías. Asimismo, no dejes de valorar que en casa 'exista otro enfoque'. Que tus hijos asistan a un diálogo pausado donde haya dos puntos de vista y finalmente se tome una decisión en consenso, le ayudará a familiarizarse con la empatía.
Respeto: Porque sin él prácticamente ninguna relación personal sería sana y fructífera. El respeto hace que las relaciones funcionen y maduren. Inculcar el respeto a tus hijos es vital para fomentar la Inteligencia Emocional. Trabajad con vuestros peques el respeto al entorno, a los animales, a otros niños y niñas, a los adultos, a sus profesores, etc. Es importante para que vean que todo esfuerzo tiene valor en sí mismo, independientemente de la recompensa final.
¡Nos vemos en el próximo capítulo!