En este caso, esta chica que contrató el seguro se quedó embarazada en el mes de agosto. Tenía algunos problemas de salud que desaconsejaban un parto natural, por lo que decidió hacerse un seguro que salud para, en el momento del parto, pudieran hacerle la cesárea.
Por ello decidió hacerse un seguro con una compañía. Al estar ya embarazada la compañía le indicó que pagase los meses de junio y junio (anteriores al embarazo), para que así pudiese entrar dentro del periodo de carencia impuesto por la compañía (esto es que tienes que estar dado de alta en el seguro al menos los 10 meses anteriores al parto).
En la página web de la compañía especifican claramente que “cualquier intervención, parto, o cesárea, o ingreso hospitalario, que se deba realizar debe haber superado los 10 meses de carencia, con lo que si se contrata un seguro médico estando embarazada, ninguna compañía cubrirá estos casos, teniendo que plantearlos de forma particular, o por seguridad social”.
El problema vino cuando el nacimiento se adelantó, y el niño nació 9 días antes de que se cumpliese el periodo de carencia de 10 meses , por lo que el hospital les reclamaba un coste de unos 10.000 euros por la hospitalización y la cesárea.
Las compañías de salud si que permiten a una mujer embarazada asegurarse en un seguro completo, pero imponen un periodo de carencia para partos, cesáreas o cualquier proceso de hospitalización o intervención quirúrgica.
Aquí os dejo información sobre las condiciones que ponen algunas compañías de seguros a mujeres embarazadas:
En el caso de Adeslas, por ejemplo, el periodo de carencia en caso de parto o cesárea es de 10 meses, mientras que en Sanitas es de 8 meses. Con Mapfre también es de 8 meses y en Asisa igualmente. Esto quiere decir que tendremos que estar al menos 8 meses antes del parto asegurados en esta compañía (aunque en esta última compañía dicen que no será exigido si es prematuro y que si, de no haberlo sido, habría superado los 8 meses del periodo de carencia.
Lo que está claro es que si estamos embarazadas y queremos hacernos un seguro tenemos que leer muy bien toda la información que nos proporcionen y, sobre todo, tener en cuenta que algunas compañías pueden no tener en cuenta si el parto se adelanta.
Por lo tanto, antes de hacer un seguro de salud estando embarazadas tenemos que pensar en la posibilidad de que quizás el parto se adelante y tengamos que pagar el coste del mismo.
¿Y vosotr@s? ¿Conocéis casos de este tipo?