Tenemos una relación muy cercana, aunque se que no es una amistad, yo soy su mama y coloco los límites, pero tengo que reconocer que, hasta ahora, no ha necesitado grandes correcciones, pero no hay que confiarse de eso ya que inevitablemente tendrá cambios mas profundos, se que lo que ellos necesitan en esa etapa es mucho apoyo, sentir que son escuchados y comprendidos, sentir que hay un tronco fuerte donde sostenerse.
Hablo a diario con él, no sé si está atento a todo lo que le digo pero se que en el subconsciente queda todo y aflora en el momento en el que uno lo necesita, por lo tanto, se que mis palabras no se las lleva el viento, hablamos de todo, de la vida, de los sueños, de las metas, de tantas cosas que nos unen, aprendo a diario de el y se que el aprende de mi aunque crea que lo sabe todo.
Hace unos días me hizo una pregunta que no dude en contestar, preguntó si yo pensaba que él estaba en capacidad de defenderse solo, si tenía las bases necesarias para sobrevivir sin nosotros y aunque me aterra que algo así ocurriera, le dije que sí, tengo confianza en lo que le hemos enseñado y en todo lo que el ha aprendido por su cuenta aparte que tiene un temperamento tranquilo y muy estable. Eso me da confianza, pero se que la calle esta llena de peligros y por muchos conocimientos que ellos tengan, por muy maduros que reaccionen y lo responsables que sean, no conocen el peligro porque no han estado expuestos a él.
Espero que mi hijo tenga la confianza en mi como para no mentirme, y poder protegerlo hasta donde el me lo permita, se que no necesitara mi protección por siempre, pero yo siempre estaré dispuesta a apoyarlo, a cuidarlo y a protegerlo, su futuro dependerá de él, de lo que el desea, sé que el perseguirá sus sueños y yo estaré allí para ayudarlo a alcanzarlos.