La pereza me llevaba a la segunda opción, pero decidí darme una vuelta por pinterest.
Hay cosas maravillosas, algunas son auténticas obras de arte con las que de momento ni me atrevo, pero también hay otras más sencillas aunque igualmente llamativas y originales, como es la tarta que os traigo hoy.
Aparentemente no llama mucho la atención, ya que la decoración que hice no fue gran cosa, pero lo mejor está en el interior.
Para el bizcocho he usado la receta del bizcocho de yogur que podéis ver aquí y un molde de unos 16 cm. porque no quería una tarta grande. Pero podéis duplicar las cantidades y prepararlo en uno de unos 20-22 cm.
Ingredientes: 1 yogur natural
3 huevos
2 vasitos* de azúcar
1 vasito* de aceite de girasol
3 vasitos* de harina
zumo de 1/2 limón y la ralladura de su piel (opcional)
1 sobre de levadura tipo royal (unos 16 g.)
Nutella
Lacasitos y gominolas y fideos de colores.
Mezclamos los ingredientes del bizcocho y dividimos la masa en dos, ya que el molde es pequeño y lo haremos en dos veces. Así nos evitamos el partir el bizcocho por la mitad.
Cuando los bizcochos estén fríos, quitamos el copete dejándolos planos. Vacíamos el centro y en uno de ellos guardamos un trozo a modo de tapa, como podéis ver en la foto.
Colocamos uno de los bizcochos en un plato y rellenamos el centro con las gominolas y lacasitos.
Cubrimos el borde con nutella y colocamos encima el otro bizcocho. Echamos más "chuches" y ponemos la tapita de bizcocho.
Cubrimos toda la tarta con nutella o si lo preferís con chocolate de cobertura derretido, y decoramos a nuestro gusto.Lo mejor es la cara que se les queda cuando haces el corte y salen los caramelos.