Como hoy es jueves, quería traeros una ricochura de receta que hice este verano y triunfé con ella en casa de unos parientes míos. Es una tarta de almendras, super deliciosa. La diferencia de esta tarta o pastel, es que deberemos de hacer como dos recetas diferentes, pues tendremos que preparar por un lado la masa y por otro la cobertura.
Pues paso a explicaros que ingredientes nos va a hacer falta...
1º. En un bol poner el azúcar y los huevos, batiremos con las varillas, hasta que la masa triplique su volumen y llegue a tener consistencia como de mousse. Precalentar el horno a 180º.
2º. Tamizar la harina con la levadura sobre la mousse preparada en el punto anterior.
3º. Derretir la mantequilla (puede ser en el microondas, o dejándola una hora antes de usar, fuera de la nevera, se pondrá en punto pomada que también nos sirve), verter en la mousse junto con la leche y vainilla, pero atención, hay que tener cuidado de mezclar todos los ingredientes con cuidado, con una cuchara de madera por ejemplo, porque no queremos que la mousse baje de tamaño.
4º. Enharinar el molde tanto por la base como laterales (nos ayudará a que no se pegue nuestra tarta), verter la masa y poner en el horno unos 30-35 minutos.
Ahora comenzaremos con la cobertura:
5º. Poner una sartén a fuego bajo, echar la mantequilla, el extracto de vainilla, la nata y el azúcar, mezclaremos bien para que todos los ingredientes se liguen.
6º. Cuando todos los ingredientes estén ligados, echaremos las láminas de almendras y la harina, marearemos de 3 a 5 minutos. Retirar.
7º. La masa del bizcocho ha terminado, no os preocupéis si tiembla al sacarlo, aún le falta otro golpe de calor que le daremos después. Con mucho cuidado, verter la cobertura sobre la masa del bizcocho, y de vuelta al horno unos 10-15 minutos.
8º. Una vez pasado el tiempo, sacar la tarta del horno, dejar atemperar unos 10 minutos, desmoldar e hincar el diente!