(Sé que un post sobre niños debería de publicarse el martes, pero es que como ahora mismo mi organización blogueril da lástima, así que cuando pillo el ordenador lanzo el post, así sin más).
Seguro que me perdonáis porque más de una y de uno lo sufriréis en vuestras propias carnes lo que es intentar conciliar la vida laboral con la familiar. Al principio no se llega a nada, y con el paso de las semanas, poco a poco (muyyyyyy poco a poco) todo va volviendo a su cauce más o menos (yo diría más menos para ser realistas).
Creemos que lo tenemos todo por fin atado y más que atado, estamos relajados porque pensamos que por fin va todo sobre ruedas, que está todo encajado, nuestro organizador en la nevera es nuestro amigo, y la paz impera en casa... ilusos... idiotas...
¡The Summer is coming!
Este es el primer verano ¡qué no sé que hacer con las enanas! Desde que soy madre, ningún verano he trabajado, era lo positivo de trabajar en un colegio. A mí me daban la opción de trabajar en las escuelas de verano, pero yo prefería "irme al paro" para poder estar con mi hija. Cuando nació BabyMonster, ese problema ni se me planteó, pues directamente ni trabajaba.
Pero ¿y ahora?
Elpadredelasfieras y yo nos hemos encontrado ante una situación totalmente nueva, y andamos como dos pollos sin cabeza, tal cual.
El curso finaliza el 23 de junio para MiniMonster ¿y luego qué? Hemos conseguido tener unos días a Minimonster encajada, pues se la llevan sus abuelos de vacaciones a la playa. A su vuelta, la hemos tenido que apuntar a un campamento de verano en un albergue, donde estará otros tantos de días, pero yendo y viniendo a casa. Cuando este primer turno de albergue termine, nos hemos visto obligados a apuntarla al segundo turno del albergue, donde ya señoras, dormirá allí (eso se va a merecer otro post, porque ando con ansiedad solo de pensar que mi niña dormirá fuera de casa). Aquí tenéis mi primer riñón, el derecho.
Por lo que, ahora mismo, en estos momentos a 19 de junio, solo hemos conseguido "encajar" a Minimonster hasta el 20 de julio ¿y el resto del verano? ¿qué hago yo?
¿Y Babymonster? no me he olvidado de ella; por suerte, su guardería continúa con su turno normal hasta agosto, en agosto ya si eso te las apañas, pasas por caja, y le apuntas en la escuela de verano. Venga, vamos sacando el segundo riñón.
Por supuesto, hemos conseguido tener a las dos enanas encajadas hasta esas fechas, previo paso por caja, que sinceramente en mi caso está siendo "lo comío por lo servío" ¡un mojón mu gordo! Porque lo poco que cobro de las prácticas del trabajo, lo estoy gastando en pagar albergues!
¡Y todavía me queda agosto! ¿Pero que hago con mis niñas en agosto? Las escuelas de verano, te largan a los niños a las 2 de la tarde ¿disculpa? ¿y los padres que trabajamos por las tardes qué hacemos? Si les dejas en el comedor de las escuelas de verano, prepárate para ir donando el hígado.
¿Pero qué mierda de conciliación es esta? ¡Es que así no hay forma! Es que tengo la sensación que voy a trabajar para pagar que otros cuiden de mis hijas, y eso me mata. Porque en nuestro caso, elpadredelasfieras es su temporada más fuerte de trabajo, así que tú le dices "vacaciones" y te dice:
- ¿Vacaciones? ¿En verano? ¿Qué es eso?
Me río por no llorar, o, me río porque estoy entrando en una locura transitoria de la cual no veo salida.
Y en mi caso, he comenzado mi nuevo trabajo con un contrato de 6 meses de prácticas, nadie en su sano juicio, te va a dar vacaciones, porque "es que es verano, y mis hijas no tienen colegio", está claro. Así que nos encontramos con dos padres, que trabajan en verano, y que sus niñas, no. ¿Os podéis imaginar el hervidero que tengo mental no?
¿Y la familia? Pues muchas sabéis que mi familia siempre ha estado ahí ayudando, pero es que ahora se da la situación que, TODOS TRABAJAN.
Ajá! la cosa mejora... ¿un valium por favor?
Vivo rodeada de post-it, cuadrantes, y planes A, B, C, y hasta X por si llega a hacer falta; a todo esto sin quitar un ojo de la, menguada, cuenta corriente.
Así que señoras, si dejáis de verme una temporada, no será porque me esté haciendo la interesante, ni porque tenga mi agenda colapsada por planes sociales; no, no... si dejáis de verme, es porque como bien se dice por aquí el sur, "he petao".
Porque este agobio no hay dios que lo aguante.
¿Cómo lo habéis aguantado tantos años vosotras?
Me quito el sombrero, me pongo a vuestros pies y os hago la ola fíjate!