Las actividades diarias son inevitables, pero cansan, llegan a ser a momentos tan rutinarias que de verdad te fastidias, aquí es donde necesitamos un momento para nosotras.
Puedes ir a hacer algo diferente o poner un día a la semana para cuidarte, ir al salón, por un helado, algo que rompa la rutina, que implique mas de dos horas y que te relaje.
Mi tiempo fuera son los miércoles, tengo tres amigas muy queridas que nos reunimos para platicar lo que pasa en la semana, nos escuchamos y nos reimos muchísimo, de verdad es terapéutico hasta cierto punto necesario, además de hay una saludable carga de cafe, té, helado, galletas, fresas con chocolate, en fin pequeños placeres culposos pero que compartidos no hacen daño. La parte que mas me gusta es cuando vemos el futuro cercano, no somos videntes claro esta, pero vemos como se comportan los hijos y "predecimos" que puede estar sucediendo, esta parte es muy divertida y mas cuando alguna es la preocupada, entre consejos buenos y un poco ácidos nos reimos muchísimo.
También me veo una vez al mes con mis amigas de infancia, ayer toco cena con ellas, esta clase de hermandad de verdad es increíble, te sientes literalmente libre de decir cualquier cosa, es saludable digo yo y termino con dolor de cara cada vez de tanto reirme.
A los 40 tenemos derecho y debemos de buscar tiempo para nosotras ya sea en soledad o acompañadas de una comadre querida, donde podamos escuchar y ser escuchadas, donde podamos salir de compras o tomar un cafe, no importa donde estemos, lo importante es compartir y romper la rutina para regresar a ella con mas ganas y alegría.