El agua es un elemento imprescindible en nuestras vidas, ya que es el mayor componente del organismo humano. Un 65% de nuestro cuerpo es agua y esta cifra aumenta hasta el 80% cuando hablamos de los más pequeños de la casa. Para limpiar nuestro organismo de toxinas y otros elementos que debemos expulsar, es necesario consumir la cantidad recomendada de agua, y este consumo debe ser un hábito que incorporemos desde la infancia de nuestro hijo.
Sin embargo, son muchos los niños que se niegan a tomar agua, generalmente, por su sabor insípido. Obligar al pequeño a beber agua no es recomendable, ya que puede sentarle mal, pero sí podemos ofrecérsela muy a menudo y así, cuando quiera, la tendrá a su alcance. Una buena idea es presentarle este líquido de manera atractiva, por ejemplo, en una botellita pequeña de un color llamativo, o que tenga la imagen de sus dibujos favoritos. Son uno de los consejos prácticos para que los ayudes a tomar agua.
Algunos niños que rechazan el agua lo hacen porque está demasiado fría, así que debemos tener en cuenta este aspecto, y darles agua del tiempo. Debemos recordar que los pequeños, cuando son bebés, están acostumbrados a la leche tibia que toman de la madre o del biberón, así que para ellos es más agradable el agua a temperatura ambiente.
Aunque debemos prestar especial atención a la cantidad de azúcar que damos a nuestros hijos, puedes añadir al agua un poquito del jugo de la fruta que más le guste, en lugar de darles zumos artificiales o refrescos, que son más calóricos. Asimismo, un aporte extra de líquido lo podemos conseguir a través de sopas, caldos, gelatinas y yogures.
La cantidad de agua que debe consumir el niño depende de su edad. En sus primeros meses, se aconseja que el bebé tome entre 750 y 800 ml, e ir ampliando esta cantidad hasta el litro o litro y medio cuando cumple su primer año. Una buena forma de saber si nuestro hijo está suficientemente hidratado es examinar el color de su orina. Si ésta es de color claro indica que el niño sí está bebiendo el líquido necesario al día, de lo contrario, si el color es oscuro e, incluso, de olor fuerte, significa que debemos darle más agua.
¿Tu hijo no bebe agua? ¿Qué haces para conseguir que lo haga?
Foto: Ran Yaniv Hartstein/flickr.
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