Arcoíris Waldorf, uno de los juguetes más completos. Gusta a pequeños y a mayores por igual. Pero ¿cuál es la clave de su éxito? Su cuidado diseño, sus materiales naturales, sus colores vivos y el amplio abanico de posibilidades de juego.
Es un juguete ecológico de madera de alta calidad y hecho a mano con acabados a base de agua y aceites naturales que le otorgan un tacto, aroma y color fabulosos.
Ofrece infinidad de posibilidades de juego creativo y abierto. Es un encajable, un juguete apilable, un juego de construcción, un juego de equilibrio, un túnel, animales, un elemento decorativo…
Es uno de los juguetes de madera más polifacéticos y adaptablesa todas las edades. Sus piezas semicirculares invitan a la construcción libre y al juego simbólico, dejando volar la imaginación y la creatividad de todos.
Es uno de los materiales de juego más versátiles que existen en la actualidad y acompaña a los peques durante muchísimo tiempo cubriendo sus necesidades de juego a lo largo de sus diferentes etapas de desarrollo. Basta con dejar a los peques solos unos minutos con él para alucinar con todo lo que son capaces de crear.
El nuestro es el tamaño grande, de 12 arcos. En la web de BrainArts podéis encontrar variantes de color y tamaño. La versión más popular se tiñe con los alegres colores del arco iris, pero también está disponible en tonos pastel o natural.
Pero, ¿por qué tiene tanto éxito?
Es muy atractivo pero poco definido y desestructurado. Puede convertirse en todo aquello que queramos. Y además, posee una alta durabilidad, debido a que está fabricado en madera maciza y tiene un diseño compacto. La simplicidad de su diseño es otro de sus grandes valores.
Con los peques menos es más. Cuanto más sencillo sea un juguete, mejor. ¿No creéis?
BENEFICIOS
Favorece su desarrollo cognitivo y sensorial.
Les ayuda a ordenar, clasificar y agrupar.
Desarrolla las habilidades motoras.
Manipulándolo favorecen su destreza y coordinación óculo-manual.
Su madera, imperfecta y natural, les da información sensorial muy valiosa.
Sus piezas les ayudan a diferenciar tamaños y colores.
Favorece su atención y concentración.
Permite el juego en solitario o en grupo.
Fomenta como ningún otro el juego simbólico ya que les permite construir todo tipo de escenarios que estimulan el lenguaje, dando pie a inventar infinidad de historias.
En definitiva, es un juguete súper completo con una increíble versatilidad y miles de posibilidades para desarrollar la mente creativa que TODOS tenemos en nuestro interior.
Fuente: este post proviene de EntreNubesEspeciales, donde puedes consultar el contenido original.
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