Aparte de los límites y rabietas, una de las grandes consultas que me llegan con frecuencia en las sesiones familiares de los papás y las mamás es:
¿Qué puedo hacer para que mi hijo(a) no se enfade tanto cuando algo no le sale o incluso tire la toalla sin persistir ni siquiera un poquito?
Muy a menudo estos comportamientos se ven minimizados cuando el niño/a posee un alto grado de confianza en sus capacidades. Es decir, que sabe que si insiste un poquito o pide ayuda podrá conseguirlo sin que sea necesario enfadarse en exceso o directamente pensar que no es capaz de hacer aquello.
Si bien es cierto que un grado de frustración cuando algo no nos sale, sobretodo si son muy pequeños, es habitual que sientan. En esta ocasión hago referencia a enfados fuertes, rabietas o una pasividad y falta de motivación, entusiasmo por aprender y mejorar.
Podremos ayudar a nuestros hijos a sentirse mejor con ellos mismos trabajando su autoconfianza, seguridad en ellos mismos y acompañando correctamente y de manera sana esa frustración.
Uno de los recursos que más me gustan para ayudar a nuestros hijos a entender el mundo que les rodea e integrar las emociones es a través de los cuentos.
Un cuento que me gusta mucho, aunque por supuesto hay más y eso queda a gusto del consumidor, para abordar la tolerancia, el respeto por los demás, la autoestima y aceptarse y quererse tal cuál uno es, es: Orejas de Mariposa.
Ahora bien, ¿Cómo podemos detectar si un niño tiene baja Autoestima?
Deberemos fijarnos si nuestro hijo(a) muestra algunas de las siguientes señales de alerta:
Preferencia por estar solo, relacionarse poco o menos con los demás.
Rápidamente dice ‘no puedo’, ‘no sé’.
Quiere que se lo hagan casi todo, sobretodo aquellas acciones en las que es poco habilidoso o está aprendiendo.
Se muestra extremadamente dependiente de sus p(m)adres.
Es inseguro y los miedos le bloquean o tiene una lista abundante de ellos. No se atreve a hacer muchas cosas o nada por sí solo, incluso acompañado.
Desiste rápidamente si algo no le sale. Baja motivación por superarse.
Exigente y perfeccionista.
Se muestra agresivo, autoritario en exceso con amigos, hermanos…
Se irrita fácilmente.
Grandes dificultades para ver el lado bueno de las cosas.
Evidentemente, éstas son solo algunas pistas sobre comportamientos que podemos detectar en nuestros hijos y nos van a alertar de una posible baja Autoestima.
Si te acabas de dar cuenta que tu hijo(a) cumple con algunas de las siguientes señales de alerta, no te agobies, recuerda que siempre es buen momento para actuar minimizando el impacto de estas y previniendo que aparezcan más.
Mejor hacer algo ahora que nunca. ¿No crees?
La autoestima baja es como conducir por la vida con el freno de mano puesto. Maxwell Maltz
Pero ¿Por qué es tan importante tener una buena autoestima?
Gozar de una sana autoestima es beneficioso para grandes y pequeños. Además de sentirnos más felices, tener una buena autoestima nos hace sentir más seguros a la hora de relacionarnos con los demás y hace que nuestro cerebro aprenda mejor.
Es decir que la confianza en nosotros mismos interfiere directamente en CÓMO NOS SENTIMOS, LA CALIDAD DE NUESTRAS RELACIONES y en CÓMO APRENDEMOS.
Si te fijas, estos 3 aspectos abarcan casi la totalidad de la vida de un niño y tienen un impacto importantísimo en su desarrollo.
La Sociedad de Psiquiatría Infantil de la Asociación Española de Pediatría asegura que los niños con una sana autoestima se sienten más seguros de sí mismos, tienen más amigos y pueden diferenciar con mayor facilidad lo que hacen bien y mal.
Ahora ya tienes más indicaciones para saber si tu hijo necesita que le ayudéis a mejorar su autoestima y qué beneficios tiene el gozar de una autoestima saludable.
Si quieres saber más y ayudar a tu hijo a sentirse seguro de sus capacidades y habilidades tengo muy buenas noticias.
Justamente estos días goza de un maravilloso descuento mi curso de Autoestima para mamás y sus hijos: Quiérete Más y mejor. Donde te doy herramientas para ayudar a tu hijo a reestablecer la confianza en él mismo y también cómo prevenir que llegue a experimentar estos estados.