De esta manera tan sencilla se puede contar con unos táperes saludables a diario, sin importar el tiempo de que se disponga. Eso sí, hay que tener muy en cuenta qué es lo que se querrá pedir o, en el caso de poder hacerlo, cocinar. Por supuesto hay platos de lo más apetecibles y siempre están las preferencias de cada persona pero, una vez más, aquí el equilibrio será fundamental.
Al menor hay que hacerle entender, de la mejor manera posible y siempre dando ejemplo los mayores, que es importante comer de todo. De hecho, si se les acostumbra desde bien pequeños lo más habitual es que esto no sea un problema cuando son más mayores.
Igualmente importante es el estar al día del menú que ofrecen en el colegio al que acudan (en el caso) para tratar que todo en su conjunto esté compensado. Si se tienen dudas lo único que habrá que hacer es ponerse en contacto con el centro docente porque ellos siempre están dispuestos a ayudar a ofrecer todo tipo de información en este sentido.
Alergias o intolerancias
Más allá de que haya platos de comida que gusten más o menos lo que tampoco se puede olvidar es que algunos niños muestran un cierto rechazo a determinados alimentos porque, de manera instintiva, saben que no les hacen bien. Suele ser así como los padres acuden al médico para averigüar qué es lo que sucede. En cualquier caso no está de más el prestar un poco de atención en lo que a esto se refiere. En ocasiones se trata de una cierta sensibilidad, como puede ocurrir con el colón irritable y, en otros casos, se puede presentar una alergia o tener una intolerancia.
El caso del gluten es de los más conocidos en los últimos años porque han sido muchas las personas afectadas las que se han dado cuenta de que de ahí provenía el orígen del problema. Y, además, de vez en cuando darles algún que otro capricho para que el comer no resulte ser una obligación sin más sino que aprendar a disfrutarlo también puede resultar interesante.
Sea como sea, los productos con los que se llenen esos táperes siempre han de ser frescos y de calidad. Algunos supermercados bio pueden ser algo más caros pero la diferencia es más que notable y, como ya apuntado, si a diario no se tiene el tiempo de preparar comida, el saber que hay empresas amigas como la mencionada siempre es una alternativa a tener en cuenta.Zona de los archivos adjuntos